Juan Pablo Gallego, abogado de las víctimas del cura Julio César Grassi, presentó este martes una denuncia contra el sacerdote por negarse a la extracción de ADN ordenada por la Justicia para su inclusión en el Registro Nacional de Datos Genéticos (RNDG) vinculados a delitos contra la integridad sexual.
Hace unas semanas, el padre, condenado a 15 años de prisión por “abuso sexual agravado y corrupción de menores” en 2009, debía realizarse la prueba para la inscripción en el registro, pero se negó al procedimiento.
En su momento, el letrado aseguró que iba a ordenar una “extracción compulsiva”, y ahora presentó la denuncia, ya que no se avanzó y todavía no se logró la muestra.
“La resolución expresa que los parámetros de Grassi, al tener sentencia y condena firme como delincuente sexual, se corresponden con lo que dispone la ley que crea el registro nacional de violadores, por lo que se ordenó extraer muestras biológicas para inscribirlo ahí”, explicó.