Los gobernadores Juan Manzur, Juan Manuel Urtubey, Miguel Lifschitz, Juan Schiaretti, Domingo Peppo y Sergio Casas analizaron hoy en Tucumán el pedido del presidente Mauricio Macri para sellar un «acuerdo nacional» en medio de la tensión económica y mantuvieron la postura de acompañar al Gobierno pero con advertencias ante la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Los mandatarios provinciales coincidieron en un encuentro de la Zona de Integración del Centro Oeste de América del Sur (Zicosur), un día después del llamado que hizo el jefe de Estado, presionado por la inestabilidad económica y los vaivenes del dólar.
Al respecto, Schiaretti consideró que hay que «cuidar la gobernabilidad», porque «cada vez que hubo una gran crisis en la Argentina» se terminó «con un número mayor de pobres y se castigó a la clase media», aunque dijo que espera que la reducción del déficit «no recaiga» sobre las provincias.
«Quiero que a la Argentina le vaya bien. Yo hago votos para que el gobierno nacional acierte y podamos superar estas dificultades que afectan a la población», subrayó el gobernador de Córdoba en declaraciones a la prensa.
Por su parte, Urtubey señaló que no está «de acuerdo con el Gobierno en algunas cosas», pero afirmó que va a «colaborar para que a la Argentina le vaya bien».
«Estoy ayudando, a pesar de ser opositor, porque quiero que a la Argentina le vaya bien», indicó el mandatario salteño, pero evaluó que «plantear que esto se resuelve sólo bajando el déficit fiscal y con un Estado más chico, es un error conceptual».
A su entender, «hay que crecer y, para lograrlo, no podés tener tasas del 40 por ciento».
«Si estás pagando tasas superiores al 40 por ciento, explícame qué actividad productiva en la Argentina te da un rendimiento del 40 por ciento, no existe, no hay ninguna. Entonces, hay que plantear una Argentina que sea sustentable y ésto no es sustentable», advirtió Urtubey en un comunicado.
Peppo, a su vez, aseguró que «la prioridad» es «mantener la gobernabilidad» y resaltó que colaborará con lo necesario para «garantizar confiabilidad en el país».
«Estamos a la expectativa de las medidas que va a tomar el gobierno nacional para ver de que manera podemos colaborar, porque la prioridad en estos casos es mantener la gobernabilidad», manifestó en declaraciones a la prensa.
Y agregó: «Vamos a aportar todo lo que de nosotros dependa para garantizar confiabilidad de nuestro país porque de esa forma retornarán los créditos para el sector privado y esa es la preocupación que tenemos».
Los gobernadores del PJ que se expresaron sobre el pedido del Presidente se encuentran dentro del grupo de denominados «dialoguistas» con el Poder Ejecutivo, aunque en paralelo impulsan el armado de un espacio opositor que le permita al Justicialismo ser competitivo en las elecciones del próximo año.