La senadora Silvia Giacoppo (Cambiemos) calificó hoy como versiones utilizadas «maliciosamente» las acusaciones que vinculan al gobierno de Jujuy, a cargo del radical Gerardo Morales, con la explotación de trabajo infantil.
«Intentan, con difamaciones, afectar el gobierno de Gerardo Morales”, aseguró esta mañana la senadora en un comunicado.
Giacoppo explicó que la información brindada por el ministro de Trabajo de Jujuy, Jorge Cabana Fusz, deja en claro el tema y mencionó «la ley nacional 26.390 de Prohibición del Trabajo Infantil y Protección del Trabajo Adolescente ratificada por la Ley de Contrato de Trabajo 20.744, que fija claramente que el trabajo adolescente es para aquellos que tienen entre 16 y 17 años».
«Nosotros fiscalizamos y certificamos con la autorización de los padres de estos menores el trabajo adolescente dando la posibilidad de que estén inscriptos en AFIP y poder contar con un aporte y obra social, es decir tengan un trabajo en blanco”, añadió.
Giacoppo señaló, además, que “de ninguna manera el gobierno de Jujuy avala el trabajo infantil”, resaltó las políticas concretas para erradicar dicha práctica y destacó la fiscalización que la provincia mantiene sobre el “trabajo adolescente protegido”.
“En el caso del sector tabacalero, otra de las críticas infundadas, es necesario aclarar que es una actividad que está dentro del convenio de corresponsabilidad gremial. Por ende es 100% en blanco y controlada por los ministerios de Trabajo de la Nación y la provincia. No hay forma de que allí se den esas situaciones”, aclaró.
“En Jujuy, comenzando por la decisión del gobernador, se trabaja a conciencia y a través de todos los organismos involucrados para erradicar el trabajo infantil en todo el territorio provincial. Todas las versiones –falsas- que circulan sólo buscan conseguir un efímero rédito político que claramente queda desenmascarado por la realidad”, añadió el texto.
La polémica por el trabajo infantil en la provincia se suscitó después de que se conociera una denuncia que indicaba que la provincia había autorizado a 45 niños a trabajar en el campo, en el sector tabacalero y otras plantaciones, algo que el ministro local de Trabajo, Cabana Fusz, desmintió.
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