Así lo hizo saber durante un encuentro que mantuvo con la conducción del Comité Nacional de la Corriente de Opinión Nacional y un nutrido grupo de dirigentes de la provincia de Buenos Aires, que se pronunciaron a favor de las aspiraciones del jujeño
El gobernador radical de Jujuy, Gerardo Morales, anunció hoy que lanzará su precandidatura a presidente de la Nación el próximo 15 de marzo, en un acto a realizarse en el estadio Luna Park o en otro escenario de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Así lo hizo saber durante un encuentro que mantuvo con la conducción del Comité Nacional de la Corriente de Opinión Nacional y un nutrido grupo de dirigentes de la provincia de Buenos Aires, que se pronunciaron a favor de las aspiraciones del jujeño.
«Es sin duda el mejor candidato que tiene el radicalismo», sentenció a su turno Federico Storani a la cabeza de la CON.
De esta manera, la Corriente de Opinión Nacional prolongó la cadena de manifestaciones de apoyo vertidas por diversas líneas radicales a favor de las aspiraciones presidencialistas de Morales, tales como la de Martín Lousteau de «Renovación», las cuales se acentuaron tras el triunfo logrado por el partido centenario en La Pampa dentro de la interna con el PRO, en el marco del primer test electoral del calendario 2023.
Así quedó reflejado un claro alineamiento detrás de la figura del gobernador de Jujuy.
El proyecto Morales 2023 sigue tomando vuelo con la maciza definición de intendentes, legisladores nacionales y provinciales, concejales y dirigentes bonaerenses, convencidos de que el norteño encarna «ideales y valores democráticos y éticos» del radicalismo, cualidades que se potencian con su «experiencia» en el ejercicio de gobernar y tomar decisiones.
Tras agradecer el acompañamiento, Morales hizo un llamado a la dirigencia nacional a «ser inteligentes» y «encontrar los caminos» para fortalecer la UCR.
«Lo podemos hacer», definió para luego anunciar el lanzamiento de su precandidatura presidencial el próximo 15 de marzo.
Además, agregó: «Tendremos tres meses para trabajar, con una mayor potencialidad territorial».
Asimismo, volvió a reclamar una «unidad partidaria» y señaló: «La fortaleza de la Unión Cívica Radical será garantía de un verdadero gobierno de coalición con un 50% de funcionarios radicales, porque sabemos gobernar».
Anticipó que se constituirá un comité de campaña en cada provincia y que la semana próxima quedará conformado el de Buenos Aires, cuyo rol será «de suma importancia, porque en Buenos Aires hay que democratizar la lapicera».
«Lo mejor es impulsar un único candidato radical a presidente y hacer todo el esfuerzo para que ese candidato llegue a las PASO, instancia a disputar con fuerza propia», subrayó.
En otro orden, recalcó que el país «necesita un presidente con liderazgo y carácter, sustentado por un plan de gobierno con apoyo colectivo», en el marco de un gobierno de coalición «que es lo que no se tuvo anteriormente, entre 2015 y 2019».
Consideró que uno de los desafíos de Juntos por el Cambio es «mantener la centralidad» e «impedir la influencia de los extremos que terminan marcando el ritmo político en algunas coaliciones».
En este sentido, llamó a «no tomar atajos», entendiendo que un eventual acuerdo con Javier Milei sería un «rejunte», por cuanto es «un farsante que cabalga sobre la bronca de la gente ante la política, llevándola, especialmente a los jóvenes, a un engaño».
«Los problemas económicos y sociales que padecemos los argentinos, tienen origen en los problemas políticos internos del Frente de Todos. Nosotros no podemos repetir esta experiencia y estamos trabajando en esa dirección», planteó.
Asimismo, estimó que, a futuro, «tiene que gobernar la política y no la economía», ya que «los economistas ortodoxos fracasaron».
«Desde la voluntad y la actitud, hay que construir poder político para resolver problemas a diario. Por eso lo que viene es liderazgo, carácter y saber dialogar», manifestó.
Desde esta visión, reivindicó el congreso programático del radicalismo convocado en Córdoba para abril, a los efectos de debatir ejes centrales de un plan de gobierno que, con posterioridad, será puesto a consideración de las otras fuerzas partidarias que integran Juntos por el Cambio.
Por otra parte, se refirió a la particular situación política instalada en Mendoza, producto de diferencias entre el radicalismo y el PRO locales, asegurando que en su carácter de presidente del partido hará «todo lo que tenga que hacer» para garantizar la gobernabilidad radical en esa provincia.
«No se hagan los distraídos», fue el claro mensaje a la dirigencia mendocina.