Mundo

Georgia mantiene en vilo a EEUU, con resultados muy ajustados para declarar ganadores


Cuanto más parejo sea el escrutinio final, más habrá que esperar para conocer los resultados definitivos ya que algunos condados ya adelantaron que terminar de contar los últimos votos el jueves y el viernes próximos

Estados Unidos se fue a dormir hoy nuevamente sin conocer unos resultados que definirán el escenario político para los próximos cuatro años, esta vez en el estado de Georgia, donde los balotajes que definirán las últimas dos bancas del Senado federal terminaron con un resultado demasiado ajustado para declarar ganadores.

Horas después del cierre de los comicios, y con 77% escrutado en ambos distritos, los senadores republicanos se imponían con una pequeña ventaja.

Según la cadena CNN, el republicano David Perdue había pasado a liderar el escrutinio con 50,7% frente al demócrata Jon Ossoff y su 49,3%, mientras que la senadora Kelly Loeffler encabezaba con 50,3% frente al otro opositor, Raphael Warnock, y su 49,7%.

Cuanto más parejo sea el escrutinio final, más habrá que esperar para conocer los resultados definitivos ya que algunos condados ya adelantaron que terminar de contar los últimos votos el jueves y el viernes próximos.

La definición es crucial para el futuro del Senado, donde los republicanos tienen seguras 50 bancas -exactamente la mitad- y los demócratas, de ganar las dos de hoy, tendrán a partir del 20 de este mes la ventaja de que cuando haya paridad de votos desempatará la vicepresidenta electa, Kamala Harris.

Por eso, tanto el presidente electo, Joe Biden, como el mandatario saliente, Donald Trump, planeaban seguir de cerca el escrutinio durante la madrugada.

Georgia es un distrito tradicionalmente favorable al Partido Republicano, pero en las elecciones generales del 3 de noviembre pasado se impuso Biden -en el primer triunfo electoral demócrata allí desde 1992-, y ninguno de los candidatos al Senado pudo consagrarse en primera vuelta.

«El futuro de nuestro país está en juego, es la última línea de defensa para nuestro modo de vida», afirmó Perdue durante la jornada electoral, según la televisora Fox News.

De los siete millones de ciudadanos empadronados, más de tres millones ya había votado anticipadamente, en un récord para elecciones parlamentarias en Georgia.

La importancia de esta elección quedó de manifiesto en la presencia ayer en el estado tanto de Biden como de Trump, quienes hicieron campaña por sus candidatos, el primero en la capital, Atlanta, y el segundo en la norteña Dalton, cerca del límite con el estado Tennessee.

Mientras Biden sostuvo en su acto que el eventual triunfo demócrata «puede cambiar el rumbo no solo durante los próximos cuatro años sino también para la próxima generación», Trump sostuvo en el suyo que hoy era la «última oportunidad de salvar al Estados Unidos» que él y sus seguidores aman, según la agencia de noticias AFP.

El balotaje en Georgia es uno de los últimos pasos de una transición que estuvo caracterizada por las continuas denuncias periodísticas y judiciales de Trump acerca de un supuesto fraude electoral sobre el que nunca aportó evidencia.

De hecho, hoy mismo el juez de Georgia Mark Cohen desestimó otra demanda de Trump que buscaba invalidar el triunfo de Biden en el distrito.

Entre otros argumentos, el magistrado sostuvo que Trump procuraba privar de sus derechos a millones de votantes después de que las elecciones se realizaran legalmente y los resultados fueran debidamente auditados y certificados, según la televisora CNN y la agencia Europa Press.

El fallo de Cohen se conoció cuando aún no se había acallado la polémica generada por la reciente difusión, por parte del diario The Washington Post, de una llamada de Trump al secretario de Estado de Georgia, su correligionario Brad Raffensperger, para presionarlo para que «encontrara» votos que le permitieran remontar la desventaja de casi 13.000 sufragios que reflejaron los cómputos oficiales.

En ese contexto, el Congreso se reunirá mañana para certificar los votos del colegio electoral que consagró a Biden con 306 votos contra 232 de Trump.

Ese trámite, que usualmente es una mera formalidad, podría resultar obstaculizado por una demanda anunciada por un grupo de senadores y representantes republicanos, pese a que la mayoría de los legisladores de ese partido, incluyendo a su líder en el Senado, Mitch McConnell, ya reconocieron la victoria de Biden.

Si pese a ello no hubiera contratiempos, el vicepresidente Mike Pence será el encargado de declarar ganador a Biden en el Congreso.

Sin perder las últimas esperanzas, Trump recordó en Twitter que «el vicepresidente tiene el poder de rechazar a los votantes elegidos fraudulentamente» y esperaba el apoyo de miles de personas que fueron convocadas para manifestarse mañana en Washington, muchas de las cuales ya habían iniciado una vigilia esta noche.