Según la empresa, ahora es la dificultad de abastecerse de autopartes la que obliga a detener la producción de la SUV Trucker. Atribuye el problema al flujo de importaciones y el acceso a divisas
General Motors volverá a parar la producción de su planta en Alvear por dos semanas, como consecuencia del desabastecimiento de piezas por parte de proveedores locales que no pueden realizar pagos de sus importaciones.
La medida comenzará a regir desde este miércoles y durará hasta el 14 de abril. La automotriz había suspendido la producción desde fin de diciembre hasta comienzos de marzo por igual motivo.
En la planta de General Motors se produce, desde ahora, un único modelo: el SUV Chevrolet Tracker. Hasta fin de año se fabricaba también el Cruze, pero se discontinuó por el fin de vida del modelo.
También hay otras automotrices con dificultades para normalizar el abastecimiento, por ejemplo, la automotriz Renault tuvo a varios proveedores locales con problemas para producir por la negativa de empresas extranjeras de seguir enviando insumos. La planta de Córdoba –donde también se fabrica la pickup Frontier de Nissan– viene operando con paradas intermitentes.
Volkswagen también estuvo parada por dos meses y retomó la producción el 11 de marzo en un turno y este lunes habilitó el segundo turno. Toyota aceptó el Bopreal para poder descomprimir la deuda que tiene con el exterior.