El ministro del Interior afirmó que, desde el oficialismo, hablaron “con cada senador” para “convencerlos de a uno” porque este proyecto “es en beneficio de los argentinos y no de un sector en particular”
El ministro del Interior, Guillermo Francos, se mostró “optimista” con la votación a favor de la Ley de Bases y sostuvo “que va a salir” aunque sabe que en el Senado existe “la complejidad de tener un bloque más minoritario”.
Por otra parte, afirmó que, desde el oficialismo, hablaron “con cada senador” para “convencerlos de a uno” de que esto “es en beneficio de los argentinos y no de un sector en particular”.
“Creo que primará la racionalidad y comprenderán la dificultad del momento que estamos transitando durante estos meses que llevamos en el gobierno. Esperemos que nos ayuden a aprobar estos instrumentos para poner el motor a la economía”, declaró Francos.
Paralelamente se refirió a aquellos que “se oponen por oponerse” porque piensan que “cuanto peor le va a la Argentina, mejor le va a determinado sector político”.
“La realidad es que somos una fuerza minoritaria en lo legislativo, como todos saben, y estamos buscando el apoyo de otras fuerzas con los que piensan que hay que generar un cambio y una transformación. Es un arduo trabajo, pero no hay que bajar los brazos”, sentenció.
Según el ministro, finalmente conversaron con todos los legisladores de todos los sectores políticos e hizo hincapié sobre el senador Lousteau “con quien han avanzado en distintos aspectos de la ley” y pudieron aclarar “algunos temas que le preocupaban”.
Con respecto a las manifestaciones de varios sindicalistas en contra a la Ley de Bases, Francos confirmó que “tienen relación con ellos desde el principio” y que están “permanentemente atentos al sector y a sus expresiones”.
“Creo que hay una vocación por entender el momento en el que se vive y apoyar, de alguna manera, para poder salir de esta situación de dificultad legislativa, de no entorpecer con medidas que hoy no tienen ningún sentido”, remarcó.
Para finalizar, destacó que, en estos momentos, el oficialismo no está preocupado por las diferencias con los sindicalistas, sino que se está “ocupando” de “obtener los instrumentos” que les “permitan avanzar” en la sanción de la ley “lo antes posible”.