El papa Francisco reconoció este sábado que la Iglesia aún no cayó «en la cuenta de lo que significa la mujer» en la institución, al cerrar las sesiones de trabajo del Sínodo dedicado a la Amazonía que, entre otros temas, le propuso al pontífice seguir con el estudio sobre un diaconado femenino para la región.
«Todavía no hemos caído en la cuenta de lo que significa la mujer en la Iglesia y nos quedamos sólo en la parte funcional. Es importante, tienen que estar en los consejos… pero su papel va mucho más allá de la funcionalidad», planteó Francisco a modo de autocrítica, al dar su discurso de clausura al trabajo de más de 20 días del Sínodo.
El discurso tuvo lugar al recibir de manos de los participantes el documento de trabajo, que reconoció que el tema del diaconado femenino «estuvo muy presente» en el Sínodo y en el que le pidieron al Papa «compartir» sus visiones con la comisión creada por el pontífice en 2016 para estudiar el tema.
«En las múltiples consultas realizadas en el espacio amazónico, se reconoció y se recalcó el papel fundamental de las mujeres religiosas y laicas en la Iglesia de la Amazonía y sus comunidades, dados los múltiples servicios que ellas brindan. En un alto número de dichas consultas, se solicitó el diaconado permanente para la mujer», planteó el punto 103 del documento.
Ese punto, de 120 en total, recibió 137 votos a favor y 30 en contra, siendo el segundo con más rechazos, solo detrás del 111, que plantea la posibilidad de ordenar hombres casados como sacerdotes.
En ese marco, Jorge Bergoglio confirmó que volverá a convocar y ampliará la comisión creada en 2016 para estudiar la posibilidad de establecer el diaconado femenino, en base al estudio sobre su factibilidad y si existieron diaconisas en los primeros años del cristianismo.
«Asumo el pedido de llamar a la comisión y seguir estudiando, como existía en la Iglesia primitiva, el diaconado permanente. Yo voy a procurar rehacer esto con la Congregación para la Doctrina de la Fe, y asumir nuevas personas en esta comisión», planteó Jorge Bergoglio.
La comisión se reunió durante dos años y en diciembre de 2018 le entregó sus conclusiones al Papa, aunque sin llegar a ningún acuerdo o conclusión sobre el tema.
«Y recojo el guante de que, como dijeron las mujeres, ‘seamos escuchadas'», agregó el pontífice en referencia al tema de los ministerios femeninos.
«Evidentemente lo que se dice en el documento queda corto de lo que es la mujer en la transmisión de la fe», destacó.