El funcionario de la policía que el jueves pasado asesinó a cuatro de sus colegas en la Prefectura de París, antes de ser abatido por un agente, tenía datos personales de decenas de sus colegas archivados en dispositivos digitales y videos de propaganda yihadista del Estado Islámico.
Esos materiales fueron encontrados en el material informático que se requisó en el allanamiento de la vivienda de Mickaël Harpon, en la localidad de Gonesse, el autor de la matanza del último jueves, explicó una fuente policial al canal de televisión France 2, según reprodujo la agencia de noticias EFE.
Los investigadores aún no pudieron determinar cómo Harpon había conseguido esos datos pero se presume que accedió por su trabajo como informático en el departamento de información de la Prefectura de Policía donde tenía acceso a ficheros con contenido secreto.
Tampoco saben qué pretendía hacer con esos datos de otros funcionarios de policía ni si los había comunicado a terceras personas.
Esas preguntas son algunas de las que van a plantear al ministro del Interior, Christophe Castaner, los miembros de la delegación parlamentaria sobre la información, en una audición a puerta cerrada, explicó este martes a los medios su presidente, el senador de Los Republicanos Christian Cambon.
El asesino de la prefectura, que tenía 45 años y era originario de la isla francesa de Martinica, en las Antillas, trabajaba en la Prefectura desde 2003 y se había convertido al islam hace una decena de años.
Según su propio servicio, había dado «señales débiles» de radicalización religiosa. Entre otras cosas, había estado en contacto con personas del movimiento salafista.
La revelación de varios de esos signos generó polémica en Francia y al reconocimiento de fallos por parte de Castaner, que en cualquier caso ha descartado dimitir como se lo han pedido varios responsables de la oposición.
Francia: abatieron a un hombre que atacó con un cuchillo a dos policías