Francia cooperará con España en la acogida de los inmigrantes rescatados en el Mediterráneo por el buque Aquarius hace una semana, que llegarán mañana al puerto de Valencia, dijo hoy la vicepresidenta del gobierno español, Carmen Calvo, tras una conversación con el embajador francés.
En un comunicado, el Ejecutivo español explica que Francia aceptará a los inmigrantes que lleguen a la ciudad mediterránea de Valencia, en el este de España, y que, «una vez cumplidos todos los protocolos que establece el procedimiento de acogida», expresen el deseo de ir a ese país.
El gobierno español se ofreció a recibirlos después de que Italia y Malta se negaran a que desembarcaran en su territorio.
El flamante jefe del Ejecutivo español, el socialista Pedro Sánchez, agradeció la oferta del presidente de Francia, Emmanuel Macron, y consideró que «éste es el marco de cooperación con el que Europa debe dar respuesta».
También hoy, el ministro español de Fomento, José Luis Ábalos, aseguró que los 630 inmigrantes del Aquarius tendrán una autorización especial de un mes, pero a partir de ahí se les tratará con la legalidad en la mano «sin excepciones».
«Esto no es un problema de inmigración, sino de hacer frente a una situación en la que había que decidir entre salvar a una gente o dejar que muriera. No hay más», argumentó, reprodujo la agencia EFE.
El pasado jueves, el canciller francés, Jean-Yves Le Drian, comunicó a su colega español, Josep Borrell, la disposición de Francia a colaborar en la acogida de pasajeros del Aquarius, después de examinarse -en España- si estos cumplen los criterios para tener derecho de asilo.
En Valencia, un dispositivo de más de 2.300 personas se encargará de la primera atención, fundamentalmente sanitaria, que necesiten los inmigrantes.
Los tres barcos que los trasladan, que navegan ya en aguas españolas, llegarán este domingo de manera escalonada, previsiblemente a primera hora de la mañana, según medios locales.
Las autoridades italianas accedieron a colaborar para trasladar a parte de los inmigrantes a dos barcos de la Marina y la Guardia Costera de este país, que navegan junto al Aquarius hacia la ciudad española.
Los inmigrantes desembarcarán en grupos de 20 para someterse a una primera valoración médica, aunque no se espera «ninguna tipología sanitaria de especial gravedad», informó hoy el subdirector general de Emergencias del gobierno regional valenciano, Jorge Suárez.
La intención es que estas personas pasen en el puerto de Valencia el menor tiempo posible, y puedan ser trasladados de forma inmediata a los lugares de recepción previstos, que están preparados ya, aunque no se informará de ellos para garantizar su intimidad.