El locutor de radio filipino Ed Dizon fue asesinado en la noche del miércoles en la ciudad de Kidapawan, en isla sureña de Mindanao, convirtiéndose en el décimo tercero durante el mandato del presidente Rodrigo Duterte.
Dizon murió en el acto tras recibir cinco impactos de bala mientras conducía su coche, después de que dos individuos en una moto se aproximaran y dispararan varias veces, informó la Unión Nacional de Periodistas de Filipinas (NUJP) en un comunicado.
Según la unión, Dizon había denunciado el pasado 4 de julio a la policía que había recibido varias amenazas de muerte relacionadas con su actividad periodística.
La NUJP recordó que Dizon es el décimo tercer reportero asesinado durante el gobierno de Duterte, que comenzó el 30 de junio de 2016, y que Filipinas es el país más letal para ejercer esa profesión en el sudeste asiático, según la Federación Internacional de Periodistas.
Desde 1986, cuando se instauró la democracia en Filipinas, un total de 186 periodistas han sido asesinados en el país. Dizon dirigió la emisora de radio local «Brigada News» hasta 2018 y luego se postuló como concejal por el municipio de Makilala para las elecciones municipales de mayo, pero perdió.
El director de la Policía Nacional de Filipinas, Oscar Albayalde, ordenó al jefe provincial de la policía que abran «inmediatamente» una investigación sobre el incidente, citaron las agencias de noticias EFE y Europa Press.
En su último informe, Reporteros sin Fronteras (RSF) consideró a Filipinas como el país más peligroso para ser periodista en Asia y el quinto a nivel mundial, tras México, Siria, Irak y Afganistán.