Política y Economía

Fernández anunció la nueva fase de la cuarentena: «Nunca restringimos libertades»


El Presidente comunicó la nueva etapa del aislamiento frente a la pandemia de coronavirus, con un foco especial en los lugares donde más avanzó el covid-19

El presidente Alberto Fernández anunció cómo continúa el aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto por la pandemia de coronavirus una vez que finalice la actual etapa, que rige hasta este domingo. Según dijo, las zonas «rojas» del país, es decir, las más afectadas, volverán a la fase 1 hasta el 30 de agosto. Rosario no está incluida en esta categoría.

El anuncio se efectuó en vivo en la Residencia de Olivos y, junto al mandatario, estuvieron el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof.

El jefe de Estado dijo que gracias a la vacuna que se fabricará en el país, «por primera vez» en la pandemia se puede ver «un horizonte». «En los primeros meses del año entrante estaría lista y eso nos va a despejar toda la incertidumbre que tenemos hoy», resaltó Fernández desde Olivos, donde agregó: «Hablé con López Obrador (presidente de México) y le dije que tenía una inmensa alegría de que la historia nos haya puesto juntos a producir la vacuna».

En el mismo sentido, rechazó las críticas de los sectores que le recriminaban «no ocuparse» de la vacuna, y recalcó que «silenciosamente» su gobierno estaba «trabajando» en el tema. «Nos decían nadie se ocupa de la vacuna, por qué no miran a Oxford, y nosotros silenciosamente estábamos trabajando», subrayó, y expresó: «Con la vacuna hoy tenemos una ventana de esperanza».

Por otro lado, indicó que «no estamos en condiciones de sentirnos con capacidad de juntarnos con alguien o no sin que eso suponga un riesgo para ambos». Y agregó: «El riesgo es que nos relajemos». «El mundo está enfermo y la única medicina que hemos encontrado hasta aquí es acotar al máximo posible la circulación y la cercanía de las personas», reiteró el Presidente.

Por eso, manifestó que el distanciamiento social «no es un acto de autoritarismo, ni de prepotencia» de su parte, sino que se basa en el alto «riesgo» de contagio. «Entiendan que aumentar la circulación, acercar los contactos físicos, es un riesgo. No tengo otra forma de resolverlo», enfatizó. Y sostuvo que «seguimos hablando de cuarentena sin que en la Argentina exista la cuarentena, porque los negocios están abiertos, porque la gente circula, la actividad industrial está por encima del 90 por ciento».

«La realidad es que está en nuestras manos cuidarnos, ya no depende de un Presidente o de un Gobernador, está en nuestras manos», resaltó el jefe de Estado. «Para muchos, se ha convertido en un tiempo de no libertad para acercarnos a los afectos, pero ojo que en esos abrazos, en esos encuentros, el riesgo se potencia», añadió Fernández.

El Presidente manifestó que «el sistema de salud está dando respuesta a todos, pero el número de contagios crece y la demanda de atención médica también y empieza a haber una ocupación de camas preocupante» en el Amba. «Los médicos hicieron un esfuerzo sobrehumano en este tiempo para que el sistema funcione y se expusieron al contagio», destacó.

«La circulación local del virus hoy alcanza a 14 provincias», detalló el mandatario nacional, y recordó el caso de Jujuy, donde por cien días no hubo casos y luego entró en crisis: «Jujuy se ofrecía para que los equipos de fútbol volvieran a entrenar y un día dos jujeños se fueron a comprar hojas de coca a Bolivia y estalló la situación».

Además, aseguró que «todos los gobernadores» con los que dialogó este jueves coincidieron en que «el aumento de casos» de las últimas semanas se debió «a la mayor circulación». Y detalló que también coincidieron en que la mayor dificultad está «en las reuniones sociales».

El Presidente volvió a decir que el problema del coronavirus «está muy lejos de ser resuelto», y reiteró que si la ciudadanía no es «responsable y los números tienden a subir» se pueden incrementar los casos y colapsar el sistema de salud.

Por todo lo mencionado, comunicó que en el Amba el aislamiento seguirá «como está ahora» y que las zonas «rojas» del país, es decir, las más afectadas, volverán a fase 1 hasta el 30 de agosto, según acordó con los gobernadores. Durante su discurso, incluyó a Rosario como uno de los territorios donde avanzó el virus con rapidez en las últimas semanas, aunque no está incluida en las localidades que vuelven a la cuarentena.

Los anuncios de Larreta

Luego tomó la palabra el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien afirmó que en la ciudad de Buenos Aires se llevan «cinco semanas de casos amesetados, en un nivel alto» y una «tasa de contagiosidad en 1». Y agregó: «Trabajando juntos vamos a salir adelante».

Además, aseguró que «el 90 por ciento de los chicos de la ciudad han estado en conexión virtual con sus escuelas», y anunció que se implementará un programa para ir a buscar «casa por casa» a los niños que tuvieron contacto con los establecimientos educativos.

«Son 500 mil chicos que han mantenido este vínculo. Pero tenemos identificado 5.100 chicos que, por diferentes situaciones, no han podido mantener ese vínculo. Vamos a lanzar un programa para ir a buscarlos casa por casa», añadió.

El jefe de Gobierno porteño también anunció que en la Ciudad de Buenos Aires se habilitarán nuevas «actividades deportivas individuales y al aire libre». «Solo estarán hablilitadas las zonas para hacer deporte», precisó, y volvió a exhortar a la «responsibilidad individual y personal» de cada ciudadano.

Kicillof, contundente

Por su parte, el gobernador bonaerense Axel Kicillof, afirmó que el anuncio sobre la producción en el país de una de las vacunas en desarrollo contra el coronavirus «lo cambia todo» ya que hace que el virus tenga «fecha de vencimiento» y que «los esfuerzos que hacemos se justifiquen».

Además, expresó que «hasta que no tengamos la vacuna, la única forma de cuidarnos es no poder estar juntos, ni tan cerca», por lo cual llamó una vez más a «no relajarnos» en los cuidados frente al coronavirus para evitar los contagios.

Kicillof también informó que hay 35 municipios del Gran Buenos Aires «muy comprometidos» por el Covid-19, donde «hay mucha circulación» del virus, y 100 municipios del interior de la provincia, donde es menor.

El gobernador bonaerense afirmó que, como está actualmente la situación en la provincia de Buenos Aires en el marco de la pandemia de coronavirus, «no se puede flexibilizar nada porque hay un riesgo muy grande». «El sistema no está colapsado porque tuvimos el tiempo que nos dio el aislamiento social; si no, estaríamos estallados y hoy estaríamos desbordados, colapsados», dijo.

Por otro lado, cuestionó a «los comunicadores y algunos sectores políticos que dicen que la pandemia no existe», mientras los hospitales están «abarrotados» en la atención de los casos de coronavirus. «No necesitamos que estén todo el tiempo negando y criticando todo, un coro permanente que conspira y ataca. No es este el momento de cavar la grieta y buscar el voto; párenla», dijo.

«No restringimos libertades»

Luego de Larreta y Kicillof, Fernández volvió a tomar la palabra para enviar un último mensaje: «Nosotros nunca restringimos libertades, sólo cuidamos la salud de la gente». Y lanzó: «Es lo mismo que si un médico me dijera que no le ponga más sal a mis comidas porque tengo presión alta, y yo le contestara que está restringiendo mi libertad de comer sal. Es exactamente lo mismo. Acá no hay libertades en juego, lo que hay es lo que nos pasa cuando enfrentamos una enfermedad, y el mundo está enfermo».

«La vacuna todavía no está y mientras esperamos que la ciencia llegue a desarrollarla, la vacuna somos nosotros», expresó. «Por favor, que no nos confundan, que no nos hagan discutir lo obvio. Sigamos trabajando juntos para pasar este mal tiempo del mejor modo», agregó al finalizar la conferencia en la Quinta de Olivos.

Continuarán bajo el régimen de aislamiento social, preventivo y obligatorio el AMBA, cuatro departamentos de Jujuy, Río Gallegos (Santa Cruz) y Río Grande (Tierra del Fuego). Se suman Tartagal (Salta), La Rioja capital y Chamical (La Rioja), Santiago capital y La Banda (Santiago del Estero).