La joven fue asesinada en la localidad entrerriana de Paraná. Su ex pareja se encuentra en prisión preventiva
Avanza la investigación del femicidio de María Julieta Riera, la joven que murió tras ser atacada a golpes y arrojada desde el balcón de un octavo piso, en la ciudad entrerriana de Paraná. Las fuentes judiciales informaron que la autopsia confirmó que se detectaron 31 lesiones, varias de ellas previas al femicidio.
Del informe forense surgió, además, que la joven fue primero atacada y asfixiada y, luego, arrojada inconsciente desde 19 metros de altura del edificio del Instituto del Seguro provincial, situado a metros de la plaza principal de Paraná y a cinco cuadras de la casa de Gobierno de Entre Ríos.
Por el femicidio de Riera (24) se encuentra bajo prisión preventiva desde el 30 de abril último Jorge Julián Christe (31), quien era pareja de la víctima y es hijo de la ex jueza en lo Civil y Comercial Ana María Stagnaro, a quien la Justicia le secuestró el teléfono celular para someterlo a pericias.
Es que, según dijeron a Télam voceros con acceso al expediente, la Justicia no descarta que la ex magistrada haya tenido alguna incidencia en la coartada que dio su hijo a la policía.
El hecho ocurrió entre las 2.50 y 3 de la madrugada del jueves 30 de abril en el departamento de Christe, ubicado en el octavo piso de un edificio del Instituto del Seguro provincial, sobre peatonal San Martín 918, en la zona céntrica de la capital entrerriana.
El fiscal del caso, Ignacio Aramberry, dijo a Télam que cuenta con registros fílmicos que indican que tras el crimen y «antes de ir a la policía» el acusado «fue a la casa de su madre», por lo que «no se descarta ninguna hipótesis sobre ella».
La primera versión que dio Christie al dirigirse a la Jefatura de Policía de Paraná tras el hecho, fue que su pareja había caído accidentalmente desde el balcón sobre un techo del patio interno del complejo de departamentos. Pero de la autopsia realizada al cuerpo surgió que el ataque contra la víctima se dividió en dos etapas: primero un ataque a golpes y luego la caída al vacío.
El fiscal cree en base a diversas pruebas obtenidas en la causa que entre las 2.20 y 2.50, Christe «agredió físicamente» a la joven y «le comprimió manualmente el cuello hasta dejarla en estado de inconsciencia». Luego, «aprovechando ese estado, la arrojó con vida desde el balcón del departamento» ubicado a más de 19 metros de altura, aseguró Aramberry.
La joven, que estudiaba para terminar el secundario, presentaba más de 31 lesiones, hematomas, hemorragias y excoriaciones en el rostro, cuello, brazos y piernas, según se desprende del informe forense.
Además, parte de las lesiones, principalmente en la zona del cuello, fueron «anteriores» a la caída, por lo que el fiscal realizó un pedido de aclaración al médico forense para que detalle cómo y cuándo se produjeron cada una.
El fiscal imputó a Christe el delito de «homicidio agravado por el vínculo, alevosía y violencia de género» y adelantó que solicitará la pena de prisión perpetua cuando llegue a juicio.
La pareja convivía desde hacía un año y medio y, según se determinó en la causa, «más de 10 personas» entre familiares y amigos de la chica «sabían que la relación que mantenían estaba caracterizada por la violencia de género», añadió el representante del Ministerio Público.
Julieta «se lo comunicó a un allegado» y familiares «pudieron advertir una relación signada por maltrato físico y agresiones sexuales y psicológicas», aseguró el fiscal.
En la audiencia en la que se le dictó prisión preventiva por 60 días, el acusado declaró ser piloto y que estaba en la etapa de sumar horas de vuelo para convertirse en piloto comercial», aunque eso no pudo corroborarse, dijo Aramberry, quien agregó que Christe no tenía ocupación fija.
El fiscal adelantó que para la semana próxima espera los resultados de las pericias realizada a los celulares secuestrados en la vivienda donde ocurrió el hecho y en la casa de la madre del imputado. También tiene previsto realizar «entrevistas a otros testigos entre vecinos y allegados» de ambos, y realizar la pericia psicológica-psiquiátrica a Christe. «Estamos trabajando para que lo antes posible se pueda elevar la causa a juicio», concluyó Aramberry.
Darío Riera, padre de la joven asesinada, solicitó al fiscal que «por ninguna cuestión técnica jurídica» Christe «obtenga algún beneficio». «Queremos que sea un juicio sea justo, claro, con igualdad ante la ley y se arribe a la verdad, que la pertenencia familiar del sospechoso de cometer este terrible hecho no sea un blindaje», agregó.