El acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Economía y las Cámaras que agrupan a la industria farmacéutica fija que los medicamentos recetados no podrán aumentar por sobre el 3,8% mensual hasta el 31 de marzo
El Centro de Profesionales Farmacéuticos Argentinos (Ceprofar) valoró este viernes el acuerdo de precios alcanzado ayer entre el Gobierno y los laboratorios, que fija aumentos de 3,8% mensual hasta el 31 de marzo de 2023 para medicamentos recetados, y reclamaron sumar a los de venta libre.
En ese sentido, señalaron que desde comienzo de año hasta el 30 de noviembre, los medicamentos de venta libre más usados aumentaron 94,8%, mientras que la inflación general que mide el Indec en el mismo período fue de 85,3%.
El acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Economía -a través de la Secretaría de Comercio- y las Cámaras que agrupan a la industria farmacéutica fija que los medicamentos recetados no podrán aumentar por sobre el 3,8% mensual hasta el 31 de marzo y, si la inflación en algún mes fuera superior a 5%, los medicamentos podrán aumentar ese mes hasta 1% por debajo del índice.
Según un relevamiento publicado por Ceprofar entre 17.000 especialidades medicinales vendidas en Argentina, entre el 1 de enero y el 30 de noviembre de este año los medicamentos recetados más usados aumentaron 87,5% promedio, mientras que los medicamentos de venta libre lo hicieron 94,8%.
«Estos valores están todos por encima del IPC nivel general medido por el Indec en el mismo período, que fue de 85,3%», señaló Ceprofar en un comunicado.
«Se observa además una distorsión en los precios, con grandes diferencias entre los precios de distintas marcas de un mismo medicamento: hay diferencias de hasta 6 veces entre la marca más cara y la más económica en medicamentos muy usados», aseguró la entidad.
Por ejemplo, citaron los casos del omeprazol (antiulceroso), el losartan (antihipertensivo), el paracetamol (analgésico), el ciprofloxacina (antibiótico) el ibuprofeno (analgésico), el salbutamol (broncodilatador) y el enalapril (antihipertensivo), entre otros.
«Esto se explica por el bajo cumplimiento y deficiente difusión de la ley 25649 de prescripción por nombre genérico» afirmó Ceprofar.