El conjunto "Pincharrata", que venía de protagonizar una de las sorpresas del debut al derrotar a River por 2 a 1, comanda la clasificación zonal con puntaje ideal
Estudiantes de La Plata (6 puntos) alcanzó esta tarde un valioso éxito sobre Godoy Cruz (3), en Mendoza y por 2 a 0, en uno de los encuentros válidos por la segunda fecha de la Copa de la Liga Profesional (LPF) de fútbol.
El partido, correspondiente a la zona A, se celebró en el estadio Malvinas Argentinas de la capital provincial.
Los tantos del elenco que dirige el DT Ricardo Zielinski fueron obra de Leandro Díaz (St. 4m.) y del debutante colombiano Pablo Sabbag (St. 44m.).
De esta manera, el conjunto ‘pincharrata’, que venía de protagonizar una de las sorpresas del debut al derrotar a River Plate por 2 a 1, comanda la clasificación zonal con puntaje ideal.
La victoria visitante no admite mayores discusiones. Con una distribución compacta en el campo de juego y con delanteros que generaron desequilibrio, Estudiantes fue más que su rival.
Ya en el primer tiempo, Leandro Díaz (el jugador más destacado de la tarde) había dispuesto de una chance clara, con un remate que se estrelló en el poste.
Y en la segunda etapa, el exdelantero de Atlético Tucumán, Lanús y Huracán, entre otros clubes, supo cuerpear a un adversario en el área de enfrente, robó la pelota y metió una media vuelta inatajable para el paraguayo Espínola (4m.) para decretar la apertura de la pizarra.
Con la ventaja a su favor, Estudiantes jugó más tranquilo, cedió iniciativa a un Godoy Cruz insulso, que no tuvo claridad y tampoco fue profundo. Por eso, el guardavallas Mariano Andújar pasó una tarde muy relajada.
Y cuando el encuentro ingresaba en el desenlace, el colombiano Sabbag empalmó de volea un envío alto y metió un zapatazo que se tradujo en el segundo y definitivo tanto del ‘Pincha’.
El gol avivó polémicas entre los jugadores del ‘Tomba’ y el autor por un festejo desubicado, que incluyó un gesto tocándose la nariz, de manera provocadora.
Los futbolistas locales pretendieron hacer justicia “por mano propia” una vez terminado el partido, por lo que efectivos policiales debieron proteger la salida del colombiano del campo de juego.