Son creados por alumnos de la Unsam con el objetivo es que las penitenciarias de la Unidad Penal 46 de Buenos Aires recorran "el país, su barrio, su casa" o los usen con fines educativos
Estudiantes de la Escuela de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional de San Martín (Unsam) diseñaron utilizando cajas de pizza con cartón microcorrugado lentes de realidad virtual para que las internas de la Unidad Penal 46 puedan «recorrer el país, su barrio, su casa o usarlos como herramienta educativa».
«El dispositivo es una estructura para sostener el celular y las lentes a una distancia determinada para, utilizando un video proyectado, dar la sensación de realidad virtual», contó a Télam el ingeniero Federico Golmar, decano de la Escuela de Ciencia y Tecnología (ECyT) de Unsam y uno de los que conforma el grupo de trabajo que confeccionó los lentes.
Golmar, quien es además investigador del Conicet, explicó que el objetivo era «hacer un dispositivo que sea económico y realizable con materiales accesibles».
«Al ser la realidad virtual una experiencia inmersiva, se produce la sensación de ‘estar’ físicamente en un lugar en el que no nos encontramos. Filmar con esta tecnología un almuerzo familiar, un momento de todos los días, la esquina del barrio, permite a quien está ‘mirando’ verse envuelto en ese espacio cotidiano», describió.
La estructura de los lentes es fabricada con cajas de pizza de cartón microcorrugado, que es marcado y cortado con la máquina cortadora láser para prototipado situada en un laboratorio de la ECyT.
Luego, a esa estructura se le agregan dos lentes de realidad virtual de acrílico y se le encastra el celular, donde se reproducen los videos en formato de realidad virtual.
Si bien es realizable a gran escala, Golmar señaló que el objetivo del proyecto «no es su producción». «En el mercado se encuentran a la venta dispositivos de realidad virtual. Nosotros sólo buscamos poder colaborar con un proyecto que es mucho más que hacer los anteojos de realidad virtual», aseguró.
El ingeniero explicó que «este proyecto tiene un doble objetivo: por un lado es una propuesta formativa en la que los estudiantes aprenden a relacionarse con nuevas tecnologías; por el otro se trata de construir -de una forma lúdica- herramientas que permitan a las personas privadas de su libertad comunicarse con el afuera en un momento de distanciamiento social, preventivo y obligatorio» por la pandemia de coronavirus.
Golmar recordó que «en este contexto de emergencia sanitaria con las visitas de los familiares suspendidas, los estudiantes cuentan con celulares y este dispositivo será el modo de conexión para acortar la distancia física entre estudiantes y talleristas».
Además de Golmar, el grupo de trabajo que confecciona los lentes de realidad virtual está conformado por el docente Gabriel Sanca, el estudiante Mateo Sauton y la no docente Maitén Schifman.
Golmar contó que «la idea surgió desde un proyecto del Centro Universitario San Martín (Cusam) que es un espacio educativo creado por la Unsam en el interior de la Unidad Penal N° 48».
«A la Escuela de Ciencia y Tecnología la convoca Lalo Paret, responsable del Programa de Desarrollo y Articulación Territorial del Lectura Mundi (Unsam), él nos puso en contacto con Marcos Perearnau (coordinador del área de Arte y Cultura del Cusam) y con Cecilia Sainz, quien es la ideóloga del proyecto, con el fin de ver la viabilidad de realizar estos dispositivos», detalló.
Más allá de la reproducción de lo que ya está filmado, como los videos de Google Cardboard y los producidos por la Secretaría de Turismo de la Nación, el otro objetivo del proyecto es que «la familia, amigos y conocidos de las internas filmen videos en 360 grados», dijo Golmar.
Por su parte, Paret, indicó que «lo importante es que este proyecto potencia el vínculo entre las presas y sus familias. La idea es hacer de esta técnica una herramienta también para la educación y la formación».
Mientras que Sainz, guionista y realizadora audiovisual, colaboradora del grupo Osadía e ideóloga del proyecto, señaló que con estos lentes «podemos simular situaciones formativas para su libertad, como entrevistas de trabajo, recorrer el Campus para que se piensen alumnas en la universidad, un viaje a otra provincia o hacer que vayan reconociendo nuevos lugares antes de atravesarlos».
Si bien por el momento los lentes sólo los recibieron las internas de la Unidad 46, ubicada en José León Suárez, partido de San Martín, Golmar señaló que «más adelante nos gustaría dar un taller en el penal sobre como armarlos, para poder después hacer una producción más grande y repartirlos en todos los penales de Buenos Aires».