Tres estudiantes bonaerenses diseñaron un guante traductor de lenguaje de señas. El mismo tiene como objetivo que las personas hipoacústicas (con dificultades para oír y hablar) tengan la posibilidad de comunicarse de una forma más eficaz al generar una voz electrónica.
Todo comenzó en 2018 cuando los chicos tuvieron que pensar un proyecto para la tesis y recibirse de técnicos eléctricos en una escuela industrial de Bahía Blanca. No lo habían pensado desde un principio, pero un evento cotidiano los llevó a eso.
Tobías Baigorria, uno de los creadores del guante, explicó al portal de noticias RT: «Estábamos juntos cuando uno de los tres se cruzó con dos personas hipoacústicas que se estaban comunicando utilizando el lenguaje de señas tradicional. Fue cuando mi compañero pensó en qué pasaría si alguno de ellos se encontrara en una situación de peligro y necesitara pedir ayuda a alguien que desconoce su lenguaje. En ese momento comenzamos a investigar sobre el tema».
Después de ciertas investigaciones sobre la combinación de circuitos electrónicos y la reproducción de sonidos, los jóvenes diseñaron el «guante traductor». Y poco después empezaron a buscar las alternativas para construirlo.
Con mucho trabajo obtuvieron la primera manopla que respondía a los movimientos y enviaba indicaciones a un transmisor. «Posee sensores en los cinco dedos, que sirven para recrear letras y formar las palabras que se quieren transmitir, con un sonido muy claro. También, a través de una aplicación para celulares y usando el Bluetooth, pueden replicarse en los dispositivos», señaló el joven.
Además de ser su tesis académica, los creadores del guante lo postularon para un concurso patrocinado por la compañía INVAP, una de las mayores firmas tecnológicas del país. Llegaron a ser finalistas y consiguieron entrenamiento de la compañía en Bariloche.
Tobías contó: «En estos momentos, uno de nuestros compañeros se encuentra capacitándose con los mejores ingenieros electrónicos. Tenemos muchas ideas para mejorar el guante, pero la financiación siempre es un problema. Con algunos ahorros propios pudimos corregir algunas cosas específicas, pero esperamos recibir algún fondo estatal o un patrocinio privado para hacer más sofisticado al equipo y que pueda ayudar a más personas».