El CEO del consejo Internacional de Aeropuertos, Felipe De Oliveira, reveló que “en 2020 los aeropuertos del mundo perdieron US$ 125.000 millones”
El CEO del consejo Internacional de Aeropuertos (ACI), Felipe De Oliveira, se pronunció hoy por “manejar en forma conjunta” la recuperación de la industria y reveló que “en 2020 los aeropuertos del mundo perdieron US$ 125.000 millones, mientras que para el 2021 la pérdida se estima entre US$ 80.000 y 90.000 millones”.
Afirmó que, no obstante esto, “más del 70% de los aeropuertos del mundo, apoyaron a las aerolíneas cuando resultaron afectadas por la pandemia”.
De Oliveira formuló estos conceptos a Télam, en el marco de la 77 edición de la Asamblea Anual General de IATA y cumbre Mundial del Transporte Aéreo que se celebra hasta hoy en Boston, Estados Unidos.
Coincidió con las apreciaciones desarrolladas por IATA en cuanto a que la recuperación de los vuelos domésticos se va a dar en los países de la región mucho antes que los internacionales, al aseverar que “estimamos que para finales del 2022 vamos a estar en una operación normal, en relación con la pre pandemia”.
“En cambio los vuelos internacionales, por las diferentes regulaciones que tienen los países, va a demorar un poco más, para fines del 2023 o principios del 2024”, dijo al tiempo que se mostró “expectante” para la concreción de estos plazos.
Agregó que “los aeropuertos jugamos un rol fundamental en la industria y así como las aerolíneas necesitan previsiones para operar, de la misma manera las necesitamos nosotros”.
“Es preciso contar con certezas respecto de los controles que cada gobierno exigirá a los visitantes extranjeros y armonizar con los restantes sectores de la industria para poder, entre todos, apuntar a una recuperación lo más cercana posible en el tiempo”, aseveró.
Insistió en que “la aviación es la industria más segura del mundo y estamos trabajando para minimizar los riesgos, teniendo en cuenta que el virus va a convivir mucho tiempo con nosotros”.
Pero advirtió que “el riesgo cero no existe. La solución está en manejar los riesgos y por eso es necesario que las autoridades sanitarias tengan muy en cuenta que nosotros somos especialistas en manejar el riesgo y en necesario que nos escuchen para coordinar las acciones”.
Explicó finalmente que “durante la crisis los aeropuertos estuvieron abiertos, funcionando a full, pero en muchísimos casos, casi sin vuelos. Esto fue un golpe muy duro y generó situaciones muy complicadas, sin haber recibido, como sí lo hicieron muchas aerolíneas, subsidios de los gobiernos, salvo en Estados Unidos, dónde sí hubo ayuda”.