Unos 60 millones de turcos están convocados a votar el domingo al nuevo presidente, en comicios trascendentales para el futuro de dicho país. Se pone en marcha un nuevo sistema presidencialista impulsado por el actual mandatario, Recep Tayyip Erdogan, quien busca su reelección.
De acuerdo con esta reforma, el futuro presidente tendrá mucho más poder que hasta ahora, pues será a la vez jefe de Estado y de Gobierno, reprodujo la agencia de noticias DPA.
El actual mandatario cerró este sábado la campaña con varios mitines en Estambul, al igual que su principal rival, Muharrem Ince, de centroizquierda.
«Tendremos una Turquía totalmente diferente. Pondremos fin a la discriminación, mañana terminaremos con los favoritismos», señaló Ince, del Partido Republicano del Pueblo (CHP), de centroizquierda, ante miles de seguidores. Ince, que es el candidato con más posibilidades de pasar a una segunda vuelta ante Erdogan, según las encuestas, fue un fuerte crítico del mandatario durante la campaña y lo acusó de tener «mentalidad fascista» y de ser un «mentiroso».
Los sondeos ubican a Erdogan como favorito para las elecciones, pero sin una mayoría de más de 50% de los votos como para ganar en primera vuelta. En ese caso debería competir en la segunda vuelta el 8 de julio con el que quede detrás de él, que según las encuestas será Ince.
Las elecciones se celebran con el país en estado de excepción, impuesto tras el intento de golpe de Estado de julio de 2016. Tanto Erdogan como Ince prometieron levantarlo si ganan los comicios.