El ministro de Defensa tucro Hulusi Akar, informó este sábado que el «centro de operaciones conjuntas» turcoestadounidense sobre Siria entró en actividad de forma plena.
«El centro de operaciones conjuntas empezó a funcionar de forma plena» aseguró el ministro, citado por la agencia estatal Anadolu. El ministro precisó que el primer vuelo común en helicóptero tuvo lugar el sábado.
Paralelamente, la milicia kurda aliada de Estados Unidos, considerada «terrorista» por Ankara, afirmó que estaba dispuesta a cooperar para lograr que la creación de una «zona de seguridad» en el norte de Siria sea un «éxito».
El «centro de operaciones conjuntas», que fue creado tras difíciles negociaciones entre Washington y Ankara, tiene como objetivo coordinar la instalación de esa «zona de seguridad» en el noreste de Siria para separar los territorios kurdos de Turquía.
Su instauración fue propuesta por Estados Unidos para disuadir a Ankara de lanzar una nueva ofensiva contra las Unidades de protección del pueblo (YPG).
Esta milicia, punta de lanza de la alianza árabokurda de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), fue socio clave de Washington en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Pero el grupo es considerado por Ankara como una extensión en Siria del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), clasificado como «terrorista» no solamente por Turquía, sino por Estados Unidos y la Unión Europea.
La jefatura militar estadounidense en Oriente Medio (Centcom) anunció en su cuenta Twitter el viernes, con fotos incluidas, que las FDS habían destruido el jueves algunas de sus «fortificaciones militares» en la frontera. Los límites de la «zona de seguridad» y el calendario de su creación no han sido comunicados por el momento.