El Pentágono anunció esta madrugada la suspensión «indefinida» de dos programas de ejercicios militares en Corea del Sur en cumplimiento de lo acordado por el presidente, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, la semana pasada.
«Para apoyar la implementación de los resultados de la Cumbre de Singapur, y en coordinación con nuestro aliado, la República de Corea, el secretario (James) Mattis ha suspendido indefinidamente los ejercicios», dijo el Pentágono en un comunicado.
Además de la ya conocida suspensión de las maniobras conjuntas de agosto «Guardián de la Libertad» (tal su nombre), canceló dos programas de entrenamiento con militares coreanos programados para los próximos tres meses. El Pentágono también anunció que «decisiones adicionales dependerán de que Corea del Norte siga con negociaciones productivas de buena fe», informó la agencia EFE.
Este anuncio llegó tras una reunión del secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis; el secretario de Estado, Mike Pompeo; el presidente del Estado Mayor Conjunto, el general Joseph Dunford; y el asesor de Seguridad Nacional de Trump, John Bolton. La reunión tenía como objetivo hablar de «la implementación de los resultados de la Cumbre de Singapur».
Los ejercicios militares «Guardián de la Libertad» son unas de las maniobras «defensivas» anuales que Washington y Seúl realizan «para mejorar la preparación» de sus fuerzas armadas, «proteger la región y mantener la estabilidad de la península». En 2017, las maniobras se desarrollaron del 21 al 31 de agosto y en ellas participaron 17.500 militares estadounidenses, 3.000 de ellos llegados de fuera de las bases que Washington tiene en Corea del Sur. Además de Estados Unidos y Corea del Sur, en las maniobras participaron Colombia, Dinamarca, Australia, Canadá, Nueva Zelanda, el Reino Unido y Holanda, todos países integrantes de la coalición liderada por Washington y Seúl en la guerra de Corea (1950-1953).
Aunque Estados Unidos siempre ha defendido que las maniobras «cumplen» con el armisticio firmado en 1953 y países neutrales ejercen de «observadores», Corea del Norte las considera una «provocación».
Los otros dos ejercicios militares cancelados son del Programa Coreano de Intercambio de Marines (KMEP, en inglés), en los que también suelen participar miles de militares de ambos países.
Las conversaciones entre Corea del Norte con Estados Unidos y con Corea del Sur dieron inicio a un período de distensión, que comenzó en febrero pasado con la invitación de Seúl a que atletas de Pyongyang participen de los Juegos Olímpicos de invierno en su país, luego de un mensaje amistoso de Kim por año nuevo. El avance de las negociaciones permitió, también, un acuerdo para repatriar los restos de soldados muertos en la Guerra de Corea (1950-1953).
Este sábado, el ejército estadounidense envió 100 cajas de madera a la frontera intercoreana para el transporte temporal de los restos de combatientes, informó la agencia Yonhap, que citó a un oficial estadounidense en Corea de Sur.
Más de 36.000 militares estadounidenses fallecieron en la Guerra de Corea y cerca de 7.700 desaparecieron, de los que 5.300 se cree que lo hicieron al norte del paralelo 38. Equipos conjuntos de Estados Unidos y Corea del Norte recuperaron 229 cuerpos entre 1996 y 2005, pero Washington suspendió el programa de búsqueda por el deterioro de las relaciones entre ambos países. En 2007, Pyongyang entregó otros seis cuerpos.