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Estados Unidos se quedará a largo plazo en Siria y promete más sanciones contra Rusia


Apenas un día después de los tan anunciados ataques de Estados Unidos, Francia y Reino Unido contra el Ejército sirio, el gobierno de Donald Trump anunció hoy nuevas e inminentes sanciones contra el mayor aliado de Damasco, Rusia, y, según contó el presidente francés, Emmanuel Macron, tomó la decisión de quedarse «a largo plazo en Siria».

En las últimas semanas, Trump había coqueteado públicamente con la idea de retirar todas las tropas y aviones de Siria, pero había encontrado resistencia en el Pentágono, desde donde aclararon que empezar a analizar y planear una salida del país árabe, pero nada inmediato.

Hoy el presidente francés anunció en una extensa entrevista con el canal local BFMTV que había convencido a Trump de «quedarse en Siria a largo plazo».

Acto seguido, Macron defendió los ataques contra las bases militares sirias del sábado a la madrugada como una represalia al presunto uso de armas químicas denunciado por la oposición de ese país árabe y aseguró que no fue una declaración de guerra, sino «una intervención multilateral» puntual.

«Tuvimos éxito: todos los misiles lanzados alcanzaron sus objetivos, las capacidades químicas del régimen sirio han sido destruidas y no hubo ninguna víctima colateral», destacó el mandatario.

Ni la Casa Blanca ni el Pentágono anunciaron un cambio de estrategia en Siria, pero la embajadora estadounidense para la ONU, Nikki Haley, sí adelantó hoy que su gobierno «no se irá (de Siria) hasta que hayan conseguido sus objetivos».

Hasta ahora, el objetivo declarado de la Casa Blanca en Siria era combatir y destruir a la milicia Estado Islámico (EI), nada más. Además, Haley informó que el gobierno no se limitará a sancionar al gobierno de Bashar al Assad por el presunto ataque químico denunciado por la oposición siria, sino que también profundizarán su enfrentamiento con Rusia.

«Verán que pronto vendrán sanciones contra Rusia», anunció la embajadora en un programa de la cadena de noticias CBS y adelantó que podrían oficializarse mañana lunes.

«Irán directamente a cualquier tipo de empresas que traten con equipos vinculados a Al Assad y a las armas químicas que usa. Creo que todos las van a sentir ahora. Creo que todos saben que envíamos un mensaje fuerte y nuestra esperanza es que lo escuchen», agregó Haley.

Desde el anterior gobierno de Barack Obama, Estados Unidos impone sanciones financieras, comerciales y políticas contra gran parte del gobierno ruso, de las empresas y bancos estatales y de aquellos vinculados a personas del círculo íntimo del presidente Vladimir Putin.

La respuesta desde Rusia no se hizo esperar. La vocera de la Cancillería rusa, Maria Zakharova, acusó a Estados Unidos de estar sancionando a su gobierno sólo por actuar como «un actor global» y afirmó que la política de la Casa Blanca hacia el Kremlin «no tiene ninguna relación con la realidad», según la agencia de noticias estatal Tass.

El sábado a la madrugada Estados Unidos, Francia y Reino Unido lanzaron ataques coordinados contra tres objetivos en el oeste del país: el primero, un centro de investigación, desarrollo, producción de armas químicas y biológicas; el segundo, un almacén de armas químicas al oeste de la ciudad de Homs; y el tercero, otro almacén de armas químicas y un puesto de mando militar en la misma zona.

Rusia fue uno de los primeros países en repudiar los ataques junto con Siria. El presidente de Rusia, Putin, habló hoy por teléfono con su par iraní, Hasan Rohani, y ambos coincidieron en que estos bombardeos dañaron las chances de que se avance en una negociación de paz para terminar con la guerra que ya lleva más de siete año, destruyó algunas de las principales ciudades, dejó un número desconocido de muertos y a más de la mitad de la población desplazada o refugiada.

Tanto Rusia como Irán -dos aliados declarados del gobierno de Al Assad que aportan hombres, aviones y armas a su lucha contra la oposición- participan de un proceso de negociación internacional paralelo al de la ONU para Siria, que está paralizado hace meses.

Las rondas de diálogo de Astaná, impulsadas por Moscú, Teherán y Turquía, en cambio, siguen avanzando con microacuerdos para treguas parciales y regionales.

«Vladimir Putin, en particular, destacó que si esas acciones (los ataques de las potencias occidentales), que fueron cometidas en violación de la carta de la ONU, continúan, entonces llevarán inevitablemente a un caos en las relaciones internacionales», afirmó un comunicado oficial ruso, citado por la agencia de noticias DPA.

Pese al frente unido formado por Trump, Macron y la primera ministra británica, Theresa May, los ataques contra Siria sí desataron algunas críticas y controversias en esos país.

En Estados Unidos, el presidente fue duramente criticado por repetir la expresión utilizada por George W Bush, tras la invasión y el derrocamiento de Saddam Hussein in Irak en 2003, una decisión que abrió una violenta ocupación militar que le costó millones de dólares y miles de vidas al país.

Hoy Trump intentó dar un giro al tema para volver a reivindicar los ataques contra Siria. «La ofensiva siria estuvo tan perfectamente ejecutada, con tal precisión, que la única manera que tuvieron los medios de comunicación falaces de menospreciarla fue por mi uso del término ‘misión conseguida'», escribió en Twitter.

En Reino Unido y en Francia, en tanto, las críticas de la oposición estuvieron dirigidas a la presunta falta de legalidad de los ataques, que no fueron aprobados por la ONU, como requiere la carta fundacional de esa organización internacional.