Lo anunció el secretario de Estado Antony Blinken, mediante un comunicado donde confirmó que "fueron disueltas y desarmadas oficialmente y ya no existen como organización unificada "
Estados Unidos retiró este martes a la exguerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de su lista de organizaciones «terroristas», anunció el secretario de Estado Antony Blinken.
«Tras un acuerdo de paz de 2016 con el gobierno colombiano, las FARC fueron disueltas y desarmadas oficialmente. Ya no existen como organización unificada dedicada al terrorismo o actividades terroristas, o con la capacidad o intención de hacerlo», manifestó el funcionario a través de un comunicado citado por la agencia de noticias AFP.
Esta eliminación de las FARC de la lista negra no modifica la posición de Estados Unidos acerca de los procesos judiciales iniciados o previstos contra exlíderes del grupo, sobre todo los sospechosos de narcotráfico, precisó Blinken.
Tampoco modifica decisiones de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia, el tribunal que juzga los peores crímenes de un conflicto en el que se contabilizan nueve millones de víctimas entre muertos, mutilados, secuestrados y desaparecidos.
Sin embargo, la decisión sí ayudará a Washington a apoyar la aplicación del acuerdo, por ejemplo, trabajando con excombatientes que depusieron las armas, agregó Blinken.
Las FARC, un movimiento que tomó las armas en la década de 1960, en plena la Guerra Fría, fueron designadas por Estados Unidos como organización terrorista extranjera en 1997, a mediados del enfrentamiento de seis décadas con el Estado colombiano, uno de los conflictos más crueles y largos de América Latina.
El 24 de noviembre de 2016, luego de negociaciones en Cuba, la guerrilla marxista de las FARC depuso las armas y firmó un acuerdo de paz con el entonces presidente colombiano Juan Manuel Santos.
En virtud de este acuerdo, las FARC se convirtieron en el partido político Comunes, con representación garantizada en el parlamento pero sin demasiada influencia en las urnas.
Sin embargo, la etiqueta de organización terrorista siguió afectando hasta hoy al exgrupo armado, ahora transformado en un partido político.
El texto también prevé reformas políticas y agrarias que deben aplicarse antes de 2031.
Aunque redujo considerablemente la violencia, diversos grupos armados operan en el país, incluidos algunos disidentes de las propias FARC.
En este sentido, el comunicado de la Casa Blanca sí señala a otros dos grupos armados.
Blinken anunció que Segunda Marquetalia y FARC-EP, dos grupos formados antiguamente por dirigentes de las FARC que se negaron a desmovilizarse, fueron agregados a la lista de organizaciones terroristas.
«También estamos designando a los respectivos líderes de esas organizaciones», afirmó.
Uno de ellos es Luciano Marín Arango, alias Iván Márquez, exnúmero dos de las FARC y exnegociador de paz en La Habana, quien fundó Segunda Marquetalia en agosto de 2019.
También figuran Hernán Darío Velásquez, conocido como El Paisa, y Henry Castellanos, alias Romaña, a quien el Gobierno estadounidense les atribuye responsabilidades de operaciones militares en Segunda Marquetalia.
En la lista negra de Washington también fueron incluidos dirigentes de las FARC-EP: su líder, Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco; el segundo al mando, Miguel Santanilla Botache, alias Gentil Duarte; y el comandante Euclides España Caicedo, alias Jhonier.
La designación significa que todas las propiedades de las personas y entidades concernidas serán bloqueadas y reportadas a la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Tesoro de Estados Unidos.