Con el propósito de sustentar el programa de desarrollo económico a largo plazo tras lanzar iniciativas de ayuda por la pandemia
El flamante presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, planea realizar un reajuste fiscal y aumentar los impuestos de manera significativa por primera vez desde 1993.
El objetivo es costear el programa de desarrollo económico a largo plazo tras su reciente iniciativa de ayudas con la que trató de paliar los efectos de la pandemia, precisó el portal Bloomberg.
El plan de ayuda económica de 1,9 billones de dólares, que incluye pagos directos de 1.400 dólares por persona a más del 85 por ciento de los hogares del país, es financiado por la deuda gubernamental, pero la financiación de la nueva medida legislativa podría basarse también en el aumento de impuestos.
El cambio está asociado con ciertos riesgos políticos, pero en caso de concretarse, podría ser también una respuesta a lo que los demócratas califican de desigualdades en el sistema tributario.
Para la Administración de Biden presupone, además, una nueva fuente de financiación para las iniciativas como la infraestructura, el clima o más ayudas a los pobres.
Actualmente entre las propuestas bajo consideración en el marco de la iniciativa, de acuerdo con fuentes del medio, están: aumento del impuesto de sociedades del 21 al 28 por ciento; la reducción de las preferencias fiscales para las entidades que no están sujetas al impuesto de sociedades (los llamados negocios pass-through que incluyen a las asociaciones y sociedades de responsabilidad limitada).
También aparecen el aumento de impuestos personales para individuos que ganen más de 400.000 dólares; el aumento del alcance del impuesto sobre el patrimonio, el aumento de la tasa fiscal sobre las ganancias de capital para las personas físicas que ganen al menos un millón de dólares al año. .