La tierna imagen sorprende al mundo. La obra «Billy Eliot» en el festival Stratford en Canadá tuvo espectadores de lujo en el teatro: una veintena de perros lazarillos sentados en las butacas observando con mucha atención.
La presentación ante los canes tuvo como finalidad principal poder entrenarlos para que puedan acompañar a sus dueños cuando quieran ir a ver una obra de teatro. «Creemos que es muy importante preparar a los perros para cualquier actividad», explicó a la radio CBC Laura Mackenzie, dueña de K-9 Country Inn Working Service Dogs, donde se entrena a los perros.
«Nos da la oportunidad de exponer a los perros a diferentes estímulos como luces, ruidos fuertes y diferentes movimientos. Nos permite lograr que los perros permanezcan relajados en espacios reducidos durante un largo período de tiempo«, agregó.
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Por su parte, Ann Swerdfager, la vocera del festival, resaltó que «todos los perros se portaron maravillosamente bien» y destacó que en el intervalo fueron llevados afuera para que puedan hacer pis.
«Estaba en el vestíbulo cuando entraron, luego se sentaron, se levantaron en el intermedio y regresaron, todas las cosas que aprendemos como humanos cuando comenzamos a ir al teatro», dijo Swerdfager,
La vocera dijo que tener a los animales en la audiencia también fue bueno para los artistas, especialmente un espectáculo como Billy Elliot que involucra a niños actores, porque los acostumbra a tener perros de servicio en la audiencia.
«Es maravilloso que ir al teatro se considere una de las cosas para las que quieres entrenar a un perro de servicio, en lugar de pensar que el teatro está fuera del alcance de las personas que requieren un animal de servicio, porque no lo es», concluyó la mujer.