CLG dialogó con Marta Blanco, especialista en ciencias de la educación, que opinó sobre la formación docente tras los errores en televisión que se volvieron virales
Desde que la pandemia del coronavirus obligó a suspender las clases presenciales en Argentina, la TV Pública comenzó a emitir el programa Seguimos Enseñando, lanzado por el Ministerio de Educación de la Nación, el cual difunde contenidos educativos destinados a los chicos que están en sus casas. En las últimas horas, el ciclo televisivo fue foco de numerosas críticas a causa de docentes que cometieron errores en cálculos matemáticos sencillos y faltas de ortografía.
Hasta el momento, hubo tres casos emblemáticos que se volvieron virales: una maestra escribió «Hervívoros», poniendo en primer lugar una «v» cuando iba una «b»; otra anotó «sepillo» en el pizarrón; y una docente resolvió mal unas ecuaciones, siendo este último el caso más reciente.
Más allá de estos errores, que pueden ser aislados o producto del nerviosismo que provocan las cámaras de televisión, la situación pone sobre la mesa una discusión que en Argentina lleva muchos años: ¿Cómo se forman a los docentes en el país? ¿La educación mejoró o empeoró con el correr de los años?
Es por eso que CLG dialogó con Marta Blanco, docente rosarina de la Universidad Católica de La Plata (Sede Rosario), especialista en filosofía y ciencias de la educación, de extensa trayectoria. La docente analizó el presente de la educación y de la formación de quienes la adoptan como su profesión, y cómo cambió a lo largo de los años.
«Creo que se debe incentivar mucho más la formación del docente, no es todo vocación y gusto por estar con los chicos, que obviamente es muy importante, pero también estamos en una sociedad que ha cambiado mucho», comenzó explicando Blanco. «En este momento el docente le está poniendo el pecho a un montón de situaciones que ni se las hubiera imaginado, pero por otro lado no sé si la formación del docente en este momento es la que corresponde, creo que nos hemos quedado un poco atrás con la formación profesional«, agregó.
Lo de poner maestras militantes al aire puede ̷f̷a̷y̷a̷r̷ fallar.
pic.twitter.com/Q2pafj7fju— Vulgarcite (@vulgarcite) May 12, 2020
En ese sentido, la especialista se refirió a las dificultades que ve en maestras y maestros al momento de enseñar: «El docente no sólo tiene que poner el cuerpo, sino también los conocimientos. Tenemos que aportar la humanidad, porque a través de la computadora y el celular los chicos tienen acceso a los datos, pero no es lo mismo el dato que el conocimiento. Hay que llegar a la información, pero que esa información forme parte del conocimiento». Y añadió: «Tengo dos nietos, escucho lo que hacen sus docentes, y de repente me encuentro con que le ponen el pecho, pero no siempre con toda la información y las formas de motivar«.
Además, analizó el presente de la docencia y lo comparó con tiempos anteriores: «Creo que hay una gran deficiencia en la formación docente. A nosotros nos enseñaron que teníamos que construir el conocimiento. Hace 50 años el docente era una persona muy bien vista y se preparaba muy bien para ello. Si bien hoy siguen existiendo muchos docentes que se forman porque es su vocación, muchos otros eligen esa carrera como una salida laboral, pero no sé si se dan cuenta de lo importante que es un docente. No sé que es lo que falta, pero nos quedamos cortos en muchas cosas».
Por otra parte, opinó sobre el rol de la tecnología en las aulas y cómo impacta en la transmisión de conocimientos: «Creo que los docentes se esfuerzan en enseñar los contenidos necesarios, pero también es cierto que los niños tienen un montón de dispositivos que le dan otro tipo de elementos, y la escuela se ha quedado un poco atrás. Las escuelas nos abrían las puertas y las ventanas al mundo del conocimiento, y hoy los chicos tienen otras puertas y otras ventanas. Tenemos que incentivar de otra manera, y para eso hay que incentivar a los docentes».
«De todas maneras, no se le puede pedir más al docente teniendo en cuenta que es un trabajador, que a lo mejor no gana lo necesario y que le pone el pecho a las balas con lo que tiene. Es una cuestión institucional», aseveró.
Por último, se refirió al lenguaje inclusivo y su utilización en instituciones educativas: «Creo que la inclusión pasa por otro lado y no sólo por cambiar algunas palabras y sílabas. La escuela ha tratado de ser inclusiva de otras maneras. Creo que no hay que cambiar el lenguaje».
Carina Cabo: «Es un llamado de atención»
CLG también dialogó con la secretaria de Cultura y Educación de Rosario, Carina Cabo, quien se refirió a los errores televisivos que se volvieron virales y también apuntó a la necesidad de una mejor formación de los profesionales de la enseñanza: «Es un llamado de atención para el Estado para tener en cuenta la necesidad de formación docente continua y en servicio».
«Hoy una maestra tiene cuatro años de formación, pero hace menos de una década se requerían sólo dos años. Entonces una maestra aprendía matemáticas como una materia más, y eso no alcanza como formación para trabajar en el aula», aseguró.
Con respecto a los errores que se cometieron en la TV Pública, señaló: «Creo que deberían haber evaluado que estaba mal hecho, cualquiera que mira el programa se da cuenta que hay un error. Estamos hablando de una cuenta donde estaba multiplicando por 100″. De todas maneras, indicó que «son errores que suelen pasar en el aula».