Los conflictos datan desde el 2006, cuando el Ejercito israelí y el grupo terrorista se enfrento durante un mes sin resultados claros
Israel y Líbano aumentaron la tensión en sus fronteras luego de que se registró un enfrentamiento armado entre el Ejercito israelí y el grupo terrorista libanés Hezbollah. La zona de violencia se dio en las Granjas de Chebá, parte israelí luego de la guerra de 1967 y aún hoy reclamada por los libaneses. El choque, según fuentes libanesas duró más de una hora.
La violencia estalla en momentos en que Israel está en alerta por la posibilidad de un ataque de Hezbollah debido a que un bombardeo aéreo israelí mató a un integrante de esa milicia en Siria la semana pasada.
El portavoz de las fuerzas israelíes, teniente coronel Jonathan Conricus, aseguró que con el ataque se «logró frustrar un intento de infiltrarse a Israel» por parte de un escuadrón de hombres armados. «Sabemos con certeza que estaban armados y que penetraron la Línea Azul hacia Israel», dijo el militar a periodistas en referencia a la línea de marca la frontera entre los dos países.
Añadió que los soldados israelíes abrieron fuego contra los terroristas cuando entraron en territorio israelí, y que los guerrilleros devolvieron el fuego.
Ningún soldado israelí resultó lastimado, dijo Conricus, pero no pudo confirmar la condición de los rebeldes ya que huyeron de la zona.
Israel y Hezbollah lucharon una guerra de un mes en el Líbano en 2006 sin un resultado claro. Israel llevó a cabo decenas de bombardeos en Siria en años recientes, contra lo que identificó como envíos de armas desde Irán hacia el Hezbollah.
Por lo pronto, no hubo comentario alguno por parte de Hezbollah.
La fuerza de paz de la ONU en el Líbano, conocida como UNFIL, informó que su comandante, mayor general Stefano Del Col, estaba en contacto con ambas partes a fin de evitar que la situación degenere en más violencia. Del Col «le pidió a las partes ejercer máxima cautela», declararon en un comunicado.