El intendente valoró la conformación del espacio que integran más de 40 organizaciones e instituciones de la ciudad y afirmó que es “una herramienta enorme”
Por su parte, el rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Franco Bartolacci, impulsor de la conformación de la multisectorial, explicó que el espacio “recoge la preocupación que tenemos todos por la situación que atraviesa la ciudad” y aclaró: “No es una situación particular de Rosario, sino de toda la Argentina, con una gravedad que nos preocupa y ocupa en Rosario”.
A su vez, planteó que pretende ser un espacio que “contribuya a exigir y controlar a todos los niveles del Estado, poniendo a disposición también las capacidades que cada una de las instituciones tiene para aportar”.
Cabe recordar que uno de los puntos acordados tras el primer encuentro de la multisectorial en febrero pasado fue solicitar audiencias con distintas autoridades, entre ellas con el intendente.
Del encuentro participaron, entre otros, representantes de la Mesa de Diálogo Interreligiosa por el Bien Común, del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario, del Banco de Alimentos de Rosario, Fundación Rosario, Junior Achievement, de la Bolsa de Comercio Rosario, Grupo Trascender, la Asociación Empresaria, la Federación Gremial de Comercio e Industria, Colegio de Escribanos, Fundación Apertura, Arzobispado de Rosario, Federación Industrial de Santa Fe, Cámara Argentina de Construcción Delegación Rosario, la Asociación Bancaria, el Foro Regional Rosario y la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica y Afines de Rosario.
Rosario pide vivir en paz
Desde la Multisectorial por la Paz difundieron un emotivo video a través de las redes sociales de las distintas organizaciones e instituciones que la conforman para replicar un mensaje: ‘Rosario pide vivir en paz’.
El audiovisual, que se viralizó rápidamente tras su publicación, se compone de imágenes históricas y actuales de la ciudad, que se combinan con las de ilustres rosarinos y son acompañadas por un texto.
“Les dimos una bandera. Los ayudamos a crecer. Los hicimos reir. Pensar. Cantar. Les demostramos que se podía amar y volver a amar. Les damos nuestra puerta al mundo. Y les dimos la última gran alegría. A cambio de todo lo que les dimos y les damos, queremos pedirles sólo una cosa: que nos ayuden. Somos Rosario y tenemos un sueño, vivir en paz”.