El ex jugador de Independiente, quien fue una de las figuras del equipo de Atlanta City donde juega desde el 2018, llegará a préstamo a River por una temporada con opción de compra y el club argentino se hará cargo de su contrato
El volante ofensivo del Atlanta City Esequiel Barco, de 22 años, tiene turno pendiente en los próximos días para la revisión médica y así poder transformarse en el quinto refuerzo del equipo para la temporada.
El ex jugador de Independiente, quien fue una de las figuras del equipo de Atlanta City donde juega desde el 2018, llegará a préstamo a River por una temporada con opción de compra y el club argentino se hará cargo de su contrato.
El equipo de la MLS, que viene de quedarse fuera de la pelea por el título en los play off al caer contra el campeón New York City en octavos, tiene que liberar uno de los contratos altos del plantel por la llegada de Thiago Almada y, por eso, Barco dejará el club.
Barco es una de las posibilidades que maneja Marcelo Gallardo para jugar de extremo por la derecha donde aún no tiene a Matías Suárez y sigue con un conflicto contractual Benjamín Rollheiser.
Desde su llegada a la MLS en 12,2 millones de dólares, Barco tuvo mucha continuidad con 109 partidos jugados, 83 desde el arranque, anotando 17 goles en todas las competiciones y siendo campeón de la MLS en 2018.
Para los laterales. se están evaluando algunos jugadores extranjeros ante la negativa de Fabrizio Angileri de arreglar su contrato y el frustrado pase de Fabricio Bustos, por lo cual en las últimas horas sonó el uruguayo Andrew Teuten, de City Torque de Montevideo.
En cuanto al cupo de extranjeros, el plantel tiene a los colombianos Juan Fernando Quintero y Jorge Carrascal, al chileno Paulo Díaz, al paraguayo Robert Rojas y al uruguayo Nicolás de la Cruz, y podría sumar uno más aunque sólo tenga la opción que firmen planilla en los partidos 5 foráneos.
Finalmente, en relación a las situaciones de Rollheiser y Angileri, a quienes el 31 de junio se les vence el contrato y fueron separados del plantel profesional y se entrenan a parte, sigue sin haber contactos y menos aun principio de acuerdo para una renovación.
«No mostraron ningún interés en acercar las partes y eso generó un mal gesto hacia el club y hacia el resto del plantel, si firman el contrato que les ofrecimos, siguen y sino seguirán en la misma situación», confirmaron fuentes de River.
Desde el entorno de ambos jugadores sostienen que los ofrecimientos no satisfacen y con este panorama tanto Rollheiser como Angileri estarán hasta el 30 de junio sin competencia, separados del plantel profesional.