El gobierno nacional aplicó un duro ajuste para todas las provincias, aunque algunas sufrieron más
El informe sobre la distribución territorial del gasto público en Argentina revela un panorama alarmante en el primer semestre de 2024, mostrando una fuerte reducción en las transferencias no automáticas de la Nación hacia las provincias, con una caída del 87,1% en términos reales. Este ajuste generó una distribución desigual, impactando de manera heterogénea a diferentes regiones del país, advierte el Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso), autores del trabajo.
Las transferencias no automáticas, que financian gastos corrientes y de capital, experimentaron una caída dramática en varias provincias. La Rioja fue la más perjudicada con una reducción del 96,5%, seguida por La Pampa (-93,8%) y Formosa (-93,2%). Este tipo de transferencias, que no se ajustan automáticamente según la recaudación fiscal o criterios establecidos, afectan directamente a la capacidad de las provincias para financiar proyectos de infraestructura y cubrir gastos esenciales.
Si bien las transferencias automáticas también se redujeron, lo hicieron en menor medida, con una baja del 12,2% en el mismo período. Sin embargo, este recorte, aunque menor, no fue uniforme en todas las provincias. Buenos Aires, por ejemplo, registró una disminución del 13,9%, mientras que Corrientes, Salta y Misiones vieron reducciones cercanas al promedio nacional.
Principales conceptos y áreas afectadas
La reducción del gasto afectó varios sectores clave, destacando la falta de financiamiento en políticas alimentarias y cajas previsionales provinciales, con recortes de hasta 94,9% y 93,6% respectivamente. Esto genera preocupaciones en términos de protección social y seguridad alimentaria, áreas cruciales para las provincias con poblaciones vulnerables.
Otras áreas significativas afectadas incluyen:
- Fondo Nacional de Incentivo Docente: Reducción del 85% en términos reales.
- Asistencia Técnico-Financiera y Desarrollo de infraestructura para el saneamiento: Afectados en un 85%.
- Desarrollo de Seguros Públicos de Salud: una caída del 46,2% real en transferencias.
- Relaciones con las provincias y Desarrollo Regional: en términos reales se quitó el 46% del aporte.
En cuanto a conexión a agua potable y expansión del alcantarillado varias provincias, especialmente en regiones críticas, no recibieron fondos para estos proyectos esenciales.
Además, 11 provincias, entre ellas Chubut, Entre Ríos, Mendoza, Río Negro y Santa Cruz, no recibieron ningún financiamiento de la Nación hasta agosto de 2024, lo que acentúa las desigualdades regionales y pone en riesgo sus economías locales y la calidad de vida de sus habitantes.
Subsidios al transporte
En términos de subsidios al transporte, el ajuste fue casi total, ya que sólo Misiones recibió aportes del Estado en esta materia.
De manera similar, en el sector de Ciencia, Tecnología e Innovación, el recorte fue del 99% real en agosto.
El ajuste en las transferencias federales, tanto automáticas como no automáticas, está generando desigualdades territoriales y afectando sectores críticos como el transporte, la educación y la tecnología. Esto no solo implica un desequilibrio económico entre provincias, sino que también pone en jaque el desarrollo regional y el acceso equitativo a servicios básicos y derechos fundamentales para los ciudadanos.