El último informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa destacó que "hay expectativas de que las ventas mejoren en noviembre y diciembre, cuando finalice el ciclo electoral"
El consumo en centros comerciales y supermercados, como también en el segmento mayorista, viene mostrando un leve pero sostenido crecimiento en los últimos meses, tras el desplome del sector en 2020 por la pandemia.
Las ventas minoristas pymes a precios constantes crecieron 9,1% en agosto frente al mismo mes de 2020 y 40,6% de los comercios relevados declaró estar mejor que en 2019, el año previo a la pandemia, de acuerdo con el último informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) difundido hoy.
Según CAME, las ventas minoristas crecieron 9,1% en agosto de este año respecto del mismo período de 2020, aunque se ubicaron 6% por debajo de las de agosto de 2019; y en el acumulado de año subieron 13,7% frente a 2020 pero cayeron 12,3% respecto de 2019.
CAME señaló que «incidieron positivamente en las ventas la estabilidad del dólar, los incrementos salariales, la menor inflación del mes, y la mayor inyección de dinero desde el Estado hacia los hogares».
La entidad consideró que «el consumo continuó recuperándose, aunque muy atado a las restricciones de los bancos en el financiamiento con tarjetas de crédito y la incertidumbre electoral, que incidieron sobre todo en la venta de bienes durables».
Frente a julio 2021, las ventas crecieron 0,6% en promedio, con los mayores aumentos en jugueterías y librerías (17,7%), ferreterías, materiales eléctricos y construcción (10,7%) y farmacias (4,2%); mientras que las mayores caídas ocurrieron en calzado y marroquinería (-8,1%), alimentos y bebidas (-4,1%) e Indumentaria, lencería y accesorios (-3%).
Respecto de agosto de 2020 crecieron 9,1% en promedio, con las mayores tasas de variación en indumentaria, lencería y accesorios (38,5%), jugueterías y librerías (24,0%), y ropa y artículos deportivos y de recreación (26,4%) y caídas en alimentos y bebidas (-7,1%) y perfumería y cosmética (-8,8%).
En el caso de electrodomésticos, artículos electrónicos, computación, celulares y accesorios, CAME destacó «el rechazo de las tarjetas de crédito por falta de fondos, o atrasos en los pagos» debido a que «los bancos vienen actualizando los límites muy por debajo de la inflación y cortando las tarjetas si se demora el pago».
«Hubo más disparidad de lo habitual entre un comercio y otro, aunque hay expectativas de que las ventas mejoren en noviembre y diciembre, cuando finalice el ciclo electoral», agregó.
En cuanto a los alimentos y bebidas, la entidad analizó que «la baja se debe a la búsqueda de productos más económicos, a las promociones de los supermercados en una economía donde la gente dedica más tiempo a buscar ofertas, y al mayor cuidado en el consumo».
«La inflación del mes en estos productos se desaceleró y muchos de los comercios consultados informaron que hicieron lo posible por mantener los precios», destacó.
En la misma línea, los últimos datos del Instituto Nacional de Censos y Estadística (Indec) reflejaron que las ventas en los grandes centros de compra o shoppings tienen una tendencia alcista en los últimos meses, luego de estar cerrados durante gran parte del 2020 por la pandemia de coronavirus.
En junio, las ventas totales en los grandes centros comerciales a precios corrientes relevadas en la encuesta nacional alcanzaron un total de 15.805,8 millones de pesos, lo que representa un incremento de 448,8% respecto al mismo mes del año anterior.
Por su parte, las ventas en los supermercados crecieron durante junio 1% en relación a igual mes de 2020 y medidas a precios constantes, aumentaron 1,3% en relación a las de mayo pasado.
El consumo en las grandes cadenas de supermercados revirtió de esta forma en parte la merma registrada en mayo en el cotejo interanual, cuando marcó un retroceso de 2,6% en media de las nuevas medidas de aislamiento parcial dispuesta durante la segunda ola de coronavirus.
En junio, las ventas en los grandes autoservicios mayoristas también marcaron una mejora respecto a doce meses atrás, con una suba de 9,4% y de 3% frente a mayo pasado.
En los supermercados, las ventas a precios corrientes en junio sumaron $ 116.328,0 millones, lo que representó un incremento de 48,7% respecto al mismo mes del año anterior, frente a un aumento de precios del 47,2%, según los datos informados por el Indec en base a la evolución del Costo de la Vida.
Por su parte, las operaciones por el canal online sumaron $ 4.810 millones, equivalente al 4,1% del total, y con una mejora de 30,8% respecto al mismo mes del año anterior.