La Administración de Alimentos y Medicamentos había autorizado el tratamiento a pacientes de coronavirus con el controversial fármaco, pero este lunes revocó el permiso
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) había autorizado el uso de emergencia de cloroquina e hidroxicloroquina, fármacos desarrollados originalmente contra la malaria, para combatir el covid-19, pero este lunes anunció que ha dado marcha atrás con esa decisión.
El argumento detrás de la revocación es que, según comunicó la jefa científica de la FDA, Denise Hinton, comunicó que el organismo llegó a la conclusión de que «es poco probable» que los regímenes de dosificación sugeridos «produzcan un efecto antiviral», tras revisar la nueva información de los recientes ensayos clínicos.
«Además, a la luz de los graves casos cardíacos en curso y otros efectos secundarios graves, los beneficios conocidos y potenciales de la cloroquina y la hidroxicloroquina ya no superan los riesgos conocidos y potenciales para el uso autorizado», afirmó la agencia.
Asimismo, se dio a conocer que la FDA tomó esta decisión después de una solicitud de Gary Disbrow, director interino de la Autoridad de Investigación y Desarrollo Avanzado Biomédico.
Un tratamiento controversial
El uso de la hidroxicloroquina para combatir el coronavirus ha generado una importante polémica a nivel internacional, principalmente desde que dirigentes polítios como Donald Trump, Jair Bolsonaro o Nayib Bukele defendieran personalmente su uso terapéutico contra el covid-19. La Casa Blanca incluso llegó a enviar dos millones de dosis de hidroxicloroquina a Brasil para combatir el coronavirus.
No obstante, el medicamento ha generado a nivel mundial dudas sobre si puede ser definido como tratamiento para el coronavirus, debido a la falta de evidencias sobre su efectividad, y algunas investigaciones han indicado que podría incluso perjudicar a los pacientes. Así, un estudio multinacional publicado en la revista The Lancet indicó que el fármaco reduce notablemente las posibilidades de supervivencia en pacientes con covid-19.