El exvolante canalla apuntó contra el fallecido Andrés Bracamonte, exjefe de la barrabrava del club de Arroyito
Emiliano Vecchio, exjugador de Rosario Central y actualmente en Defensores de Belgrano, habló con crudeza sobre su salida del Canalla y los conflictos que vivió con la barra brava del club. Durante su paso entre 2020 y 2022, el mediocampista ofensivo experimentó situaciones de hostigamiento y amenazas que finalmente precipitaron su partida.
En diálogo con TNT Sports, Vecchio fue contundente al explicar por qué decidió irse de Rosario Central: «Cuando me llamó ni lo dudé, de una. Con un montón de dudas, Rosario es una ciudad muy jodida. Tuve el vuelto en su momento, como una tarjeta de crédito, me llegó. Por cosas externas que pasaron en ese momento».
El futbolista detalló que los problemas con la barra vienen desde hace años. «La barra manejaba Central cuando era chico, manejaba a todos los jugadores. Tenías que firmar con la barra, no tenías opción. Cuando me voy en ese momento me representaba la barrabrava como a todos los jugadores porque era así, y cuando vuelvo esa persona estaba y como vuelvo de la mano del Kily no pudo decir nada. Era el jefe de la barra que falleció hace poco», mencionó en referencia a su salida en 2008 por conflictos con Pillín Bracamonte.
Vecchio también relató un episodio particularmente violento que vivió en el vestuario tras la salida del Kily González como técnico: «Cuando el Kily se va, ahí me tocó a mí. Me golpearon la puerta, fueron al vestuario, se metieron, eran un montón y adelante de todos los compañeros me dijeron que me tenía que ir. Era el capitán del equipo, en ese momento amenazaron a mi familia, un montón de cosas. No olvidaron eso. Ni siquiera 15 años después. Cuando se va el Kily hablan con todos los entrenadores y el requisito número 1 era ‘tenés que sacar a Emiliano'».
Además, involucró a Leandro Somoza, quien asumió como entrenador en 2022 tras la partida del Kily. Vecchio recordó: «Fue Somoza y como era su primera experiencia dijo que sí, me sacó. Le dije ‘vas a durar poco en Central, conozco el club, estos dirigentes te van a echar, no tenés la espalda ni las herramientas para manejar un club como Central’. Duró 10 fechas».
Finalmente, el exjugador de Central reveló cómo fue su último día en el club: «Ahí entró la barra, me dijo ‘te tenés que ir’, no me dejaron entrar, agarré mis cosas en una bolsa de residuos y me fui. Así me fui de Central».