El referente de la izquierda aventajaba a la representante de la derecha por 102 mil votos con el 96% de los votos escrutados
Mientras que con más del 96 por ciento de las votos escrutados, el izquierdista Pedro Castillo estiraba algo más su leve ventaja, su rival en el balotaje de Perú, la derechista Keiko Fujimori, denunció fraude, aunque sin presentar por el momento pruebas.
Castillo aventajaba a Fujimori por 102 mil votos, según informó la Oficina Nacional de Procesos Electorales de ese país, distancia que se estiró un poco más, ya que este martes por la mañana era de 95 mil, más allá que aún se esperaban los datos de la votación de los peruanos radicados en el extranjero.
Hasta entrada la tarde, la Oficina Nacional de Procesos Electorales llevaba emitidas 33 comunicaciones con la actualización de los resultados y sólo se habían procesado 166.264 votos, sin que se alterase la diferencia que separa al candidato de izquierda Pedro Castillo de la derechista Keiko Fujimori: apenas 102 mil.
En porcentajes se repitió el 50,2 contra 49,7 a favor de Perú Libre con que había cerrado en la víspera, en una paridad que se mantiene cuando restarían contabilizar las actas domésticas más rezagadas en arribar a los centros de cómputo desde zonas alejadas del interior, como el Vraem, y desde las de jurisdicciones de la Amazonía, cuyo traslado es complejo por el clima, la geografía o el necesario uso de aeronaves.
Pero la gran expectativa en los comandos electorales está puesta en lo que traigan las valijas diplomáticas provenientes de los 75 países en los que residen 997.000 ciudadanos peruanos en condiciones de participar.
El traslado físico de las actas electorales está cargo de 28 funcionarios consulares, que son portadores de las actas de 32 oficinas consulares, 75 centros de votación y 2.169 mesas de sufragio. Se trata de votos provenientes desde distintas ciudades, desde Madrid a Nueva Jersey.
Si hubiera asistencia perfecta, representarían el 4% del padrón, pero en la primera vuelta la participación se redujo a 211 mil, o sea, 0,8%.
El último dato que reportó la ONPE es que se llevaban recibidas desde todos los países del mundo donde votan los peruanos 85.225 sufragios, el 64,419% de actas procesadas, en las que Fujimori obtuvo el 66,194% (125.102 votos), contra el 33,806% de Castillo (63.890 votos).
Para el experto en derecho electoral José Tello, hay que prestarle atención al voto en el extranjero, que también podría mover el tablero.
Para el mediodía de este miércoles 9 está previsto que entre el último material proveniente desde San Pablo (Brasil) e Iquique (Chile), si no el jueves.
De modo que los resultados podrían estar asentados en unas dos semanas.
Del millón en total de residentes en el exterior empadronados, 309.602 estaban llamados a votar en Estados Unidos, el país con la mayor colonia peruana radicada afuera del país, desde donde hasta ahora habían sido procesados 53 mil votos, repartidos en 41.667 para la coalición conservadora y 11.525 para la izquierda, y restaban contar 22.714.
Si se mantuviera la proporción, Fujimori debería contar casi 18 mil adhesiones más y Castillo no más de 5 mil, por lo que serían 13 mil votos de diferencia para la Fuerza Popular.
Pero esa porción no sería preciso ser acreditado a ninguno de los contendientes, porque para los residentes en el extranjero el voto es voluntario, ya que no hay sanción efectiva por omisión al sufragio.
En otro orden, en una conferencia de prensa celebrada este martes, Fujimori, quien poco antes había asegurado que iba a ser respetuosa del proceso electoral, denunció que tiene indicios de irregularidades en el conteo que constituirían un fraude electoral, aunque aclaró que no presentó ninguna prueba que haga pensar que en efecto es así.
«Hay una clara intención de boicotear la voluntad popular», sostuvo la hija del ex presidente Alberto Fujimori, mientras pidió a la gente que difundiera videos en ese dirección con el hashtag #FraudeEnMesa.
Entre los indicios de los que habló se encuentran las impugnaciones a las actas que han hecho los miembros del partido de Castillo, una cuestión en la que la autoridad electoral tiene la última palabra, aunque en la práctica, no implica ninguna irregularidad impugnar un número alto de actas, publica El País de España.
Las denuncias de Fujimori aparecen cuando en el tramo final la leve ventaja de Castillo parecía consolidarse.
No obstante, la misma candidata admitió en su confianza en poder remontar la ventaja gracias a los sufragios de los peruanos en el exterior.
«Sabemos que están llegando los votos de los peruanos que residen del exterior y confiamos que con el recuento de estas actas la votación se va a emparejar», expresó la candidata.
Por otro lado, la posibilidad de «fraude» fue desestimado en un reporte de la Unión Interamericana de Organismos Electorales, que ponderó a la ONPE, el instituto electoral peruano, y el Jurado Nacional de Elecciones «por organizar un proceso correcto y exitoso, de acuerdo con los estándares nacionales e internacionales».
Además, Iván Lanegra, secretario general de la peruana Asociación Civil Transparencia -especializada en observación electoral- rechazó que se pueda hablar de «fraude» en los comicios al contestar las afirmaciones de Fujimori.