El vicepresidente de Afganistán, Abdul Rashid Dostum, escapó ileso a un ataque de los talibanes en el que murió uno de sus guardaespaldas en la provincia de Balkh, norte del país, revelaron hoy fuentes de su partido.
El sábado alrededor de las 15:00 hora local (12:30 GMT), «cuando el primer vicepresidente, el general Abdul Rashid Dustom, salió de Balkh hacia la provincia de Jawzjan se enfrentó a una emboscada enemiga» informó a la agencia de noticias EFE un portavoz del partido Junbish-e-Millie, Kanishka Turkistani.
De acuerdo a ese funcionario, los atacantes asaltaron el convoy del vicepresidente después de que los primeros vehículos ingresaran sin problemas a la zona.
La emboscada dio pie a «enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los atacantes, hasta que después de unos minutos de balacera, los enemigos abandonaron el área», dijo.
Al menos una decena de atacantes fueron abatidos o heridos en el área, dijo la fuente que evitó precisar el número exacto de muertos.
«Desafortunadamente, uno de los agentes de seguridad murió y otros dos resultaron heridos durante el ataque», añadió.
El atentado fue reivindicado por los talibanes en un mensaje en Twitter de su habitual vocero Zabihullah Mujahid, que aseguró que «el comandante Asadullah, un aliado cercano y comandante militar del general Dostum, murió durante el ataque a su convoy el sábado en el distrito de Charbolak», en Balkh.
Este es el segundo atentado del que Dostum escapa ileso en el último año.
El pasado 22 julio, el vicepresidente afgano y antiguo señor de la guerra logró huir sin lesiones de un atentado cerca del aeropuerto de Kabul, cuando este regresaba a la capital afgana después de un año de exilio en Turquía.
En esa oportunidad, el grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó el atentado, que según detalló entonces, fue perpetrado por un insurgente que detonó los explosivos que portaba, y aseguró que el objetivo del mismo era el vicepresidente afgano y sus seguidores.
Dostum es uno de los caudillos afganos más poderosos, con fama de sanguinario y un historial de constantes cambios de bando durante las guerras ocurridas en Afganistán desde la invasión soviética (1979-89) hasta la caída del régimen talibán con la invasión estadounidense en 2001.
Como miembro de la Alianza del Norte combatió con ayuda estadounidense a los talibanes que resistían en el norte del país y, según algunas denuncias, es responsable de la muerte por asfixia de cientos de ellos tomados prisioneros, durante su traslado a una prisión en contenedores prácticamente sellados.