Mariano Antenore, de Amigos del Riel, detalló que, de 2015 a hoy, se duplicó la cantidad de pasajeros en el sistema de trenes
Mariano Antenore, de Amigos del Riel, detalló que, de 2015 a hoy, se duplicó la cantidad de pasajeros en el sistema de trenes
El tren en Argentina tiene una particular historia: desde ser una de las redes ferroviarias más grandes del mundo al desmantelamiento de vías y su privatización. Ahora, en medio de una crisis, los trenes de pasajeros pelean por resurgir como medio de transporte por ser una alternativa económica y Rosario es el ejemplo.
Siempre significó una opción más barata que el auto, el colectivo y, por supuesto, el avión. Sin embargo, producto de la dolarización de los combustibles, los precios del ómnibus de larga distancia han aumentado considerablemente, lo que deja al tren como la alternativa más económica.
Actualmente un pasaje de colectivo de Rosario a Retiro, sólo de ida, cuesta cerca de $820, mientras que el mismo trayecto en tren ida y vuelta sale $720 en la categoría pullman. Muchos pueden pensar en que la diferencia de precio está justificada por el tiempo de viaje, aunque la realidad indica que no es tanto mayor: el tren tarda cerca de 6 horas y 30 minutos, mientras que el colectivo, que debería tardar 4 horas y 15 minutos, puede llegar a demorar más de cinco horas en realizar el viaje.
CLG dialogó con Mariano Antenore, de la asociación rosarina Amigos del Riel, quien habló sobre el crecimiento del tren en Rosario en los últimos años y explicó que los bajos costos de los boletos atraen a nuevos pasajeros: «La utilización del tren ha ido creciendo a medida de que se fueron conociendo las nuevas formaciones del ferrocarril, que fueron incorporadas a partir de 2015. Desde entonces hasta hoy se mejoró media hora el tiempo de viaje, aunque hay que reconocer que la principal causa del crecimiento es la diferencia de precio con el colectivo. Es determinante para que una persona o una familia pueda viajar«.
«El tren no le está quitando gente al colectivo, está conquistando pasajeros que de otra manera no podrían estar viajando. No todos pueden pagar 850 pesos por un pasaje de colectivo. La baja que está teniendo el transporte de larga distancia tiene que ver precisamente con los altos costos: la quita de subsidios a nivel nacional y, a su vez, un afán rentístico de las empresas de no resignar ganancias», agregó.
Antenore detalló que en los últimos cuatro años la cantidad de pasajeros se duplicó: «Respecto de 2015 a hoy, estamos hablando de un crecimiento del 100% en la cantidad de pasajeros. En 2016 el tren, que hasta entonces terminaba en Rosario Sur, se prolongó hasta Rosario Norte, como el sentido común lo indicaba. Eso permitió que se pudieran captar pasajeros de otras zonas de la ciudad que hasta ese momento no estaban dispuestos a trasladarse hasta la zona sur».
Rosario-Retiro en 4 horas: cerca y lejos a la vez
El principal problema del sistema ferroviario en las últimas dos décadas ha sido el estado de las vías. Luego de la privatización en los gobiernos de Carlos Menem, la red se vino a pique, afectando notablemente a la velocidad en la que pueden circular las formaciones.
En los últimos meses el tramo entre Rosario y Capital Federal se vio renovado casi en su totalidad, lo que permitió bajar el tiempo de viaje de 7 a 6 horas y media. Sin embargo, según cuenta Antenore, las obras que se realizaron deberían permitir un viaje de al menos cuatro horas y media. Entonces, ¿por qué no sucede?: «Desde Rosario Sur hasta Capital Federal las vías se renovaron a cero kilómetro, pero todavía no se puede bajar a cuatro horas de viaje. Esto responde a que el concesionario de cargas, pese a que las inversiones las realizó el Estado nacional, sigue teniendo la potestad de fijar los horarios de los trenes de pasajeros«.
«Este concesionario no prioriza el paso de estas formaciones. Hay 36 barreras automáticas preparadas para inaugurarse y no se ponen de acuerdo con Nación para hacerlo. Si todos estos detalles menores se corrigiesen, estaríamos hablando de un tren entre Rosario y Capital Federal que tardaría entre cuatro horas y cuatro horas y media. Mientras tanto, se demora seis horas y media por una falta de sentido común«, aseveró.
Grandes deudas
«La asignatura pendiente es sumar nuevos destinos«, aseguró el referente de Amigos del Riel. «Todos sabemos que la gestión nacional se ha concentrado en Capital Federal y el Gran Buenos Aires. Acá están faltando más frecuencias a Capital, Tucumán y Córdoba, mejorando los tiempos de viaje. Viajar de Rosario a Córdoba demanda 12 horas y media, es muchísimo«, añadió.
«En 1989 teníamos cuatro formaciones en marcha a Buenos Aires por día: uno que iba y otro que volvía a la mañana, y lo mismo por la tarde. Además, el Estrella del Norte que va a Tucumán solía ser diario, y ahora pasa sólo dos veces por semana«, señaló.
Además, destacó la importancia de volver a unir las dos ciudades más importantes de la provincia: «Otra deuda es recuperar el enlace entre Rosario Norte y la ciudad de Santa Fe. El servicio de ómnibus entre las dos ciudades está manejado por dos empresas, lo que forma un oligopolio, y un viaje cuesta $615 para hacer sólo 170 kilómetros. El tren vendría a dar una respuesta a muchísimas personas».