Se le pedía información sobre posibles clientes relacionados con el Estado para los que haya trabajado antes de ser Presidente
El titular de la Oficina Anticorrupción, Félix Crous, quien responde al espacio kirchnerista, le solicitó al presidente Alberto Fernández informes sobre quiénes habían sido sus clientes y éste no se los envió. Mientras tanto, a partir de esa tensa situación, la oposición reaccionó cuestionando a Fernández.
Según trascendió, el Presidente se negó a revelar quiénes fueron sus clientes en los tres años previos a asumir la presidencia, cuando se desempeñó como abogado y consultor. Fue la Oficina Anticorrupción la que solicitó que presentara una «nómina» de las personas y sociedades que sean concesionarias o proveedoras del Estado, o realicen actividades reguladas, para las que Fernández haya trabajado.
El pasado 19 de febrero un dictamen firmado por el titular de la OA, Félix Crous, le recomendó al Presidente, además, que renunciara a su mandato como titular de la firma Inmueble Callao 1960 SA y que se tomara licencia como profesor en la Universidad de Buenos Aires, ya que el ejercicio en simultáneo de los dos cargos, advirtió la OA, incumple la Constitución, pero Fernández también rechazó ese pedido del organismo.
El pedido de la OA fue realizado tras una solicitud de diputados de la Coalición Cívica, los cuales hicieron una presentación luego de que Alberto Fernández dijera que en su actividad privada tuvo relación con empresas del Grupo Indalo, de Cristóbal López.
El Presidente rechazó un mes después el requerimiento de la OA. «No advierto haber incumplido normativa alguna que me obligue a exteriorizar otra información que la oportunamente suministrada», escribió Fernández en una nota enviada al organismo el 16 de marzo.
El repudio de la oposición
Ante la publicación del diario La Nación, referentes de la oposición, principalmente de Juntos por el Cambio, salieron a cuestionar al presidente Alberto Fernández. La ex ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aseguró que «el mensaje que deja es pobre y peligroso».
Si Alberto Fernández se niega a responder para quién trabajó antes de ser elegido Presidente, el mensaje que dejá es pobre y peligroso. Debería dar el ejemplo, brindar la información a la Oficina Anticorrupción y evitar cualquier sospecha relacionada con su actividad anterior. https://t.co/LHuKRXJEWH
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) August 26, 2020
Por su parte, la ex titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, advirtió que «Fernández ningunea y prepotea» a dicha oficina.
Si MM se negaba a una recomendación o pedido de la OA, sólo me hubiera quedado abandonar el gobierno. Alberto Fernández ningunea y prepotea a la Oficina Anticorrupción. Rompe todo con un argumento leguleyo pedorro. El que esconde, algo oculta!
— Laura Alonso 🇦🇷 (@lauritalonso) August 26, 2020
Buen día.
Alberto Fernández rechazó un pedido de la Oficina Anticorrupción: le negó información sobre sus clientes previos a asumir la Presidencia https://t.co/1J4rrtDw3H
— Waldo Wolff (@WolffWaldo) August 26, 2020
Félix Crous, un hombre «de izquierda con orientación marxista»
Féliz Crous es el titular de la Oficina Anticorrupción desde diciembre y en sus primeras declaraciones como funcionario dejó en clara su ideología: «Soy un hombre de izquierda con orientación marxista que votó por el Frente de Todos en las últimas elecciones. Nunca he tenido vicios como el ‘gorilismo’».
En aquel momento, Crous se refirió a la labor de su predecesora, Laura Alonso: «Yo no quiero ser auditor de su función. Al margen de que si me encuentro un ‘muerto en el placard’, tendré que hacer lo que se hace en esos casos. Si bien ella ha tenido una actuación pública, seguramente hay una actuación que no ha trascendido, que probablemente tenga que ver con los méritos y el trabajo de sus técnicos y de su personal».
Con respeto a Alberto Fernández, había expresado: «El Presidente me dijo que su idea no era la de perseguir a nadie, que él no venía a perseguir opositores. Nuestra idea es tener independencia con los profesionales que llevan adelante los juicios que están en curso donde la Oficina se ha presentado como querellante».