El tenista argentino Juan Ignacio Londero amaneció este lunes con el mejor ranking de su carrera. Luego de alcanzar la final en Bastad, trepó al 56° puesto del escalafón mundial, aunque en el torneo sueco se había llevado todos los flashes no precisamente por sus méritos deportivos.
Tras caer frente al chileno Nicolás Jarry en la final, el nacido en Córdoba se disponía a dar el tradicional discurso post torneo mediante una traductora, pero rompió el protocolo, le pidió a la mujer que no lo tradujera y quiso hablarle en inglés al público presente.
«Hello. My english is so bad. I speak slow. The next year, my english better. I promise», balbuceó en un inglés muy primitivo Londero, que poco a poco fue conquistando a un público que estalló de risa ante el esfuerzo del cordobés por hacerse entender.
Luego fue el turno de felicitar al campeón y hasta se animó a hablarle al director del torneo: «The best tournament in the world», le dijo.
«Muy buena semana, muchas gracias. Esperemos seguir teniendo muchas semanas así. Un saludo grande a toda la gente en Argentina y see you next year», concluyó Londero, a esa altura frente a una ovación gigante, incluso mayor a la que se llevó el campeón Jarry.
Lóndero, campeón este año en Córdoba, su provincia natal, ascendió del puesto 71 al 56 en el ranking mundial por su actuación en Bastad, que se jugó sobre polvo de ladrillo con premios por 586.140 euros.
El tenista de Villa María buscaba convertirse en el tercer argentino campeón del abierto sueco después del tandilense Mariano Zabaleta, ganador en las ediciones 2003 y 2004, y el chascomunense Carlos Berlocq, consagrado en 2013.
Fuente: Minuto Uno