«Es una verdad terrible, injusta», declaró este viernes el técnico del Nantes, Vahid Halilhodzic, después de la identificación del cadáver del atacante argentino Emiliano Sala, fallecido en un accidente de avión el 21 de enero en el Canal de la Mancha.
«Habíamos guardado la esperanza, pero sabíamos al final que era mínima, casi una ilusión, utópica», añadió el entrenador, que se presentó solo a la rueda de prensa previa al duelo contra el Nimes, el domingo. En un principio también iban a participar el arquero Ciprian Tatarusanu y el medio Abdoulaye Touré.
«Para la familia de Emiliano y del piloto es algo terrible», añadió el técnico franco-bosnio. Muy cercano al jugador desde su llegada al club en octubre, Coach Vahid quiso rendir «un homenaje a alguien que va a dejar una huella eterna en este club, por su comportamiento, su modestia, no solo como jugador sino como hombre».
Horas antes el Nantes había anunciado la retirada del número 9 de los dorsales del primer equipo en homenaje al jugador. Sala y su piloto, el británico David Ibbotson, de 59, volaban el 21 de enero entre Francia y el Reino Unido cuando su avión desapareció de los radares a unos 20 km de la isla británica de Guernsey. Su cuerpo fue reconocido el jueves.
«Antes del entrenamiento vamos a hacer una pequeña ceremonia digna y modesta, como él era. ¿Después podremos trabajar? Eso es otra cosa», añadió sobre la sesión prevista tras la conferencia.
Tras fichar por el Nantes en julio de 2015, Sala había finalizado como máximo goleador del club en las tres últimas tres temporadas. En enero se había comprometido con el Cardiff, ciudad a la que viajaba cuando se produjo el accidente.