Según el registro oficial, en 2021 hay 8.000 enfermeros europeos menos que en 2016
El servicio de salud del Reino Unido (NHS) se ve amenazado por una escasez de personal potenciada por la pandemia de coronavirus, una ola de jubilaciones y el endurecimiento de las normas migratorias tras el Brexit, por lo que depende de trabajadores extranjeros para su supervivencia, advirtieron hoy expertos.
El NHS es uno de los empleadores más cosmopolitas del mundo: en 2020 contaban con 211 nacionalidades entre sus trabajadores en el país.
Por ello, las restricciones a los viajes debido a la pandemia crearon una escasez de personal, según Faizan Rana, responsable de operaciones de un hospital londinense, citado por la agencia de noticias AFP.
Entre marzo de 2020 y 2021 llegaron al Reino Unido 3.700 trabajadores sanitarios extranjeros menos que en 2019/2020.
Según el registro oficial, en 2021 hay 8.000 enfermeros europeos menos que en 2016, año del referendo sobre la salida de la Unión Europea.
Más de la mitad de los que abandonan el país citaron el Brexit como motivo de su decisión, según una encuesta realizada en 2020 por el consejo de enfermeros y obstetras.
Para 2029, el cóctel explosivo de Brexit, endurecimiento de las normas migratorias y pandemia podría dar lugar a una escasez crónica de 108.000 enfermeros, afirma por su parte el think tank Health Foundation, lo que supondría una pérdida de más de un tercio de su plantilla actual, de unos 300.000 enfermeros.
Traer a trabajadores sanitarios extranjeros fue durante mucho tiempo «una solución improvisada» en el Reino Unido, que viene sufriendo 40 años de «crisis recurrentes», explica Mark Dayan, analista del grupo de expertos en salud Nuffield Trust.
El Brexit también hizo más complicado incorporar a nuevo personal sanitario europeo: con la introducción de un sistema de inmigración en el que los solicitantes deben cumplir con altos niveles salariales y de dominio del inglés, y tener una oferta de trabajo cualificado.
En este contexto, el Gobierno británico creó un régimen especial de visas para el personal sanitario, pero en opinión de Akshay Akulwar, médico indio de 34 años que trabaja en el NHS, sus compatriotas preferirán cada vez más Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Medio Oriente por sus mejores condiciones.
El Gobierno de Boris Johnson anunció este mes que destinaría 36.000 millones de libras (49.000 millones de dólares) adicionales al NHS en tres años.
Pero la inyección de dinero por sí sola no resolverá la escasez de personal, afirma el analista Mark Dayan, que aboga por una mejor planificación y formación del personal.