Este sábado, trabajadores lucifuercistas recorrieron el Hospital Víctor J. Vilela y el merendero Los Chicos de la Vía. Además apoyaron una actividad de una FM Comunitaria
Este sábado, trabajadores lucifuercistas recorrieron el Hospital Víctor J. Vilela y el merendero Los Chicos de la Vía. Además apoyaron una actividad de una FM Comunitaria
Una vez más el trabajo fuera del gremio copó la agenda del Sindicato de Luz y Fuerza y este sábado por la mañana la Campaña Solidaria Permanente llegó al grupo de voluntarias del Hospital de Niños Dr. Víctor J. Vilela y al merendero Los Chicos de la Vía. Por la tarde, acercaron donaciones a Alicia y Norma, dos mamás solidarias que el domingo harán un arroz con pollo para recolectar dinero.
La primera parada fue en el efector público, donde el equipo del sindicato se encontró con las mujeres voluntarias que recibieron la donación de dos rollos de tela para poder hacer toallas y toallones para asistir a los niños y familias internadas en el hospital.
Lucía Contreras, una de las voluntarias del Vilela, habló con CLG mientras veía ingresar los rollos y contó el trabajo que realizan en el cual puntualizan el “apoyo emocional” a todos los que pasan por el nosocomio.
Ropa, toallas, pañales o juguetes, son algunos de los elementos que el grupo acerca a las familias que pasan días y noches en las salas de internación y tienen un permanente pedido de donaciones que se extiende a productos de higiene personal como shampoo, crema enjuague, jabón y oleo calcáreo, entre otras. “Todo lo que se pueda acercar es bienvenido”, explicó Contreras.
El grupo de 80 mujeres brinda este servicio de manera desinteresada y, como expuso Lucía, suelen encontrarse con chicos con los cuales han generado “una conexión muy grande”.
“Hemos empatizado un montón. Uno intenta ayudarlos como sea posible y es muy grato cuando nos dan lugar a esa conexión”, subrayó la voluntaria y rápidamente agregó: “Es darle nuestro tiempo, porque esa es la manera que encontramos para ayudar”.
Luego de dejar el hospital, el Sindicato de Luz y Fuerza fue hasta el merendero “Los Chicos de la Vía”, ubicado en Felipe Moré y la vía, entre Cochabamba y avenida Pellegrini. Allí esperaba Luciana, quién hace poco más de un año debido a la crisis social y económica del país, decidió abrir el merendero justo entre los barrios Urquiza y Cinco Esquinas.
Allí, Gabriela Cericola, del área de relaciones intersindicales, DDHH, Género e Igualdad de Luz y Fuerza, describió las donaciones realizadas: leche, chocolate, galletitas, mate cocido, azúcar, entre otros elementos. “Ellos la vienen remando y laburando fuerte con todos los niños y niñas del barrio y no podemos estar ajenos ni ausentes”, indicó.
La relación entre el Sindicato y el merendero se volvió muy estrecha y ya en la época navideña la Campaña Solidaria Permanente llegó a la zona para potenciar las fiestas de los más de 80 chicos que asisten a Los Chicos de la Vía.
Por último, Cericola mostró los sentimientos que le genera este tipo de recorridas y esgrimió: “Lo que siempre nos llevamos de las recorridas son dos cosas: tristeza y admiración. La tristeza por la lucha que llevan adelante, pero también la admiración que te dan estás personas ya que día a día dan este compromiso y vocación desinteresada por los que menos tienen y los que más sufren”.
Por la tarde, el gremio entregó frutas e insumos en el club Social Lux (Urquiza y Pascual Rosas), ya que mañana domingo la FM Comunitaria Aire, realizará un almuerzo para colaborar con chicos con capacidades diferentes.
Norma y Alicia son madres de chicos con discapacidad y son quienes impulsan este arroz con pollo que se hará mañana. La primera de ellas, explicó a CLG que el objetivo del mismo es el de «juntar dinero para quienes necesitan más que nosotros».
«Va a haber sorteos, regalos, caramelos. Agradecemos a Luz y Fuerza por las donaciones y a la concejala Norma López que también dio dinero. A su vez agradezco a todos los que nos ayudaron y pusieron un granito de arena para que se efectúe».
Por su parte, Cericola recordó que las primeras «ayudas» a estas mujeres fueron cuando Norma pedía un medicamento que no conseguía y que en esta oportunidad, se acercaron » porque la idea es seguir juntando fondos para seguir colaborando con quienes hoy no tienen un ingreso fijo».
«Para nosotros ayudar en las distintas jornadas es muy reconfortante más allá de poder hacer distintas evaluaciones de la situación en general que se vive», comentó la referente del área de relaciones intersindicales, DDHH, Género e Igualdad.
Sin embargo, aclaró que esta última actividad «tiene un plus»: «Los niños y niñas con capacidades diferentes tienen ese ángel que nos hace sentir bien y querer colaborar, ayudar y apoyarlos continuamente. Esta actividad creo que remueve muchos más sentimientos y tener una charla con estos chicos es muy lindo, porque tienen tanto para enseñar que realmente en lo personal, hoy me llevo un plus».
«Vamos a seguir ayudando cada vez que nos pidan, cada vez que nos requieran. Nuestra campaña sigue llegando a todos los lugares, sin distinción sin análisis subjetivo de nada, siendo lo más coherentes posibles y siempre dando una mano a quien más lo necesite», remarcó.