Walter Palombi, secretario general del sindicato de Correos de Rosario, fustigó la medida del gobierno nacional al aclarar que el mercado está desregulado desde 1993
El gobierno nacional anunció con bombos y platillos la desregulación del mercado postal de Argentina. Mediante el decreto 1005/24, la administración de Javier Milei dispuso una serie de medidas que nada repercute en la actividad de Correo Argentina, la empresa estatal de mensajería de bandera. En este contexto, Walter Palombi, secretario general del Sindicato de Correos de Rosario, expresó su escepticismo frente al nuevo decreto: «No hace más que reafirmar un sistema desregulado desde hace décadas».
Palombi explicó que el sector postal está en una situación de desregulación desde 1993, cuando el decreto 1187 permitió que cualquier empresa con una inversión mínima de 5.000 pesos pudiera ingresar al mercado postal. «Desde entonces, cualquiera puede obtener una licencia de prestación postal», señaló. Agregó que el decreto actual «parece más una acción para posicionarse en contra de las empresas estatales que una verdadera medida de cambio».
«Este decreto no cambia nada porque ya estamos desregulados desde 1993. La ley actual permite operar con la libertad que el mercado impone», sostuvo.
Consultado sobre las declaraciones del gobierno respecto a que el nuevo decreto modernizaría y judicializaría el sistema de mensajería, Palombi mostró desconfianza. «Es más bien un intento de demostrar que están ‘atacando al Estado’, pero lo que logran es generar incertidumbre entre los trabajadores del sector», advirtió. Palombi subrayó que la medida, aunque no implica una privatización formal, «abre las puertas a concesiones que podrían, eventualmente, debilitar a la empresa estatal».
El gremialista explicó que el correo ya fue concesionado en 1997, y fue recién en 2003 cuando el gobierno de Néstor Kirchner volvió a estatizarlo a través de un decreto el 19 de noviembre de ese año. Para el líder sindical, la postura del sindicato sigue siendo de alerta ante cualquier intento de privatización, aunque aseguró que «este decreto, por sí solo, no lo permite».
Para Palombi, el enfoque del sindicato debe mantenerse en la recuperación salarial y la seguridad laboral. Expresó su preocupación por la pérdida de 4.000 puestos en la empresa de correos en lo que va del año, lo que representa un desafío importante en cuanto a sostenibilidad laboral. «Hoy el correo no es una empresa deficitaria, pero hemos perdido trabajadores. Necesitamos mantener el foco en mejorar salarios y condiciones de trabajo, ya que hace tres meses no recibimos aumento», enfatizó.
«No queremos que este decreto desvíe la atención de los problemas reales, que son la recuperación del salario y la protección de nuestras fuentes de trabajo», concluyó.