El legislador nacional santafesino del Frente de Todos era uno de los cuatro de la Cámara alta que no se habían expresado públicamente por este tema
El senador santafesino del Frente de Todos Roberto Mirabella se refirió hoy al proyecto de legalización del aborto y dijo tener una «posición tomada» respecto a que «es un tema de salud pública», al tiempo que buscó desmarcarse de la categoría de «indefinido».
Mirabella figuraba entre los cuatro senadores que no expresaron públicamente su postura junto a la neuquina Lucila Crexell (Federal), la entrerriana Stella Maris Olalla (Juntos por el Cambio) y su comprovinciano Edgardo Kueider (Frente de Todos).
«Yo tengo una posición tomada. No sé por qué me ponen en ese lugar. De hecho, la tengo porque en febrero de 2019 presenté un proyecto para despenalizar el tema. Acá hay una posición tomada. Digo que es un tema de salud pública», afirmó el senador en declaraciones a una radio provincial.
Tras señalar que «es un tema muy complejo», Mirabella expresó: «Me parece que en términos generales yo estoy a favor, porque presente este proyecto, pero bueno vamos a analizar en profundidad que pasa en Diputados».
De esa manera, aludió al proyecto que envió el Gobierno a la Cámara baja, donde según el senador santafesino hay que «ver si el texto final será el que mandó el Ejecutivo o habrá modificaciones y, si se aprueba, ver si llega a senadores igual a como fue enviado por el Poder Ejecutivo».
«Este es un tema que hay que tomarlo con mucha seriedad porque es complejo y además toca valores y convicciones personales y creo que esta problemática no se debe tomar a la ligera, no es una cuestión de un color de otro o de posiciones encontradas», agregó Mirabella.
En la misma línea, remarcó: «Me parece que hay que tratar de que no se planteen los extremos y buscar salidas que tengan como cuestión principal la salud pública».
Si bien evitó adelantar el sentido de su voto sobre el proyecto del Gobierno, la definición de Mirabella altera levemente el «poroteo» de votos en el Senado al haber pedido que no lo ubiquen entre los «indecisos» y dejado en claro que no está en contra.
De esta manera, el sector del Senado que está a favor de la legalización podría sumar un voto y redondear los 33 para recortar la diferencia con quienes se oponen, que hasta el momento reúnen 35 voluntades, mientras que se mantienen tres indefinidos y un ausente (el tucumano José Alperovich, de licencia).
En la Cámara de Diputados el plan del sector del oficialismo que apoya la legalización es acelerar el trámite para llegar a la votación antes de fin de año, teniendo en cuenta que en 2018 -cuando el proyecto resultó rechazado en el Senado- pasaron más de 700 expositores y el tratamiento duró más de dos meses.
Los «verdes» son optimistas respecto de la posibilidad de que el proyecto vuelva a contar con la aprobación de la Cámara baja y todas las miradas se posan sobre el Senado, donde siguen arriba los «celestes» y el oficialismo evalúa la táctica para dar vuelta ese número.