Se pondrá en funcionamiento el próximo domingo 7 de abril, a las 20 horas, en Pasaje Marconi 2040. "Lo que estamos necesitando es absolutamente todo", admitió en diálogo con CLG Jorgelina Calderón, una de las principales voluntarias de Sol de Noche
- Por Matías Gregorio
Sol de Noche, uno de los reconocidos refugios nocturnos de la ciudad, volverá a abrir sus puertas. La noticia es bien recibida por las tantas personas que durante seis meses pasaron sus días en la calle. Ahora, regresarán a su hogar, ese que desde hace más de 11 años se encarga de dar asilo durante los meses de invierno a personas que se encuentran en situación de calle.
Para poder recibir a todas las personas de la mejor manera, desde el albergue, que comenzará funcionar nuevamente a partir del domingo 7 de abril a las 20 horas, están pidiendo la colaboración de toda la ciudadanía y pusieron en marcha una colecta solidaria.
«Lo que estamos necesitando es absolutamente todo», admitió en diálogo con CLG Jorgelina Calderón, una de las principales voluntarias de Sol de Noche. La integrante de la ONG explicó que les hace falta «todo lo que se requiere para que funcione una casa», como alimentos perecederos y no perecederos, artículos de higiene personal, productos de limpieza, y también dinero para mantener la estructura del lugar, pagar los impuestos y comprar la comida que falte.
Arrancamos una nueva temporada y necesitamos de todos!!! ♥️ Aquí les dejamos cuales son nuestras necesidades. Contactanos para coordinar el retiro de la donación al 152827133#solidaridad #ayuda #donación #sumate #año2019 #rosariosantafe #rosario #RefugioSolDeNoche #colecta pic.twitter.com/OL4cEMiehn
— Refugio Sol de Noche (@Refugiosoldenoc) March 20, 2019
En Pasaje Marconi 2040, no sólo se presta una cama a aquellos que la necesitan, también se les ofrece la comida: desayuno, merienda y cena. Les dan la posibilidad de bañarse, con todo lo que ello implica, es decir, un kit de aseo personal y ropa limpia. Todo se realiza y funciona exclusivamente gracias al voluntariado y las donaciones de la gente. Por eso, Jorgelina lanzó otro pedido: «Para funcionar cómodamente necesitamos alrededor de 80 o 90 voluntarios, y hoy estamos entre 60 y 70 porque hay que tener en cuenta que no todos tienen el mismo compromiso».
«Sostener un lugar abierto todos los días, durante tantas horas, con tantas actividades, la verdad es que cuesta bastante. Por eso necesitamos voluntarios y con mayor tiempo de compromiso, mejor», añadió.
Los interesados se pueden contactar al teléfono del refugio (3412827133) o acercarse los dos sábados siguientes a las reuniones de nuevos voluntarios que se realizan en el refugio, a las 18 horas. Se puede participar ya sea cubriendo un turno por la noche o formando parte de alguno de los grupos como el de stock – que se encarga de la mercadería – o el de reinserción y acción social, que está en contacto directo con los “refus”, como ellos llaman, abriendo el diálogo y ayudando a reinsertarlos poco a poco.
Reencuentro
Los preparativos ya comenzaron. La noche del 7 de abril será más que especial: «Es el reencuentro con ellos. Sol de Noche es una institución bastante especial, tenemos vínculos todo el tiempo, los conocemos desde hace años. El reencontrarse significa verlos a veces con deterioro por estar seis meses en la calle, o también con deterioro emocional porque cuando uno cierra las puertas es como cerrar la puerta de un hogar, se quedan sin todo ese vínculo que generan durante seis meses y en algunos casos seis meses multiplicados por años. Si bien es muy trabajoso en temas organizativos, es muy emotivo, hay risas, hay llantos, hay baile», comentó Calderón.
Actualmente, el refugio tiene capacidad para 62 personas, y desde la ONG esperan una gran demanda de gente: «Durante los primeros días de estos últimos años se estuvo llenando, cosa que antes no pasaba. Hay muchas familias que se fueron desmembrando. Madres que me han llamado diciéndome ‘me ubicaron a mí, pero mi hijo está en la calle, no pudimos pagar el alquiler’. El panorama es bastante desalentador y eso implica que el refugio se llene», narró la voluntaria.
Por último, adelantó que planean seguir con todos los talleres que se realizaron el año pasado, siempre dependiendo de la disponibilidad de horarios de los voluntarios.