El pálido rostro de un retoño de dos días durmiendo en brazos de su padre es lo único que los británicos pudieron entrever el miércoles del bebé de Harry y Meghan, quienes no anunciaron el nombre del nuevo miembro de la familia real británica.
«Tengo a los dos mejores hombres del mundo, así que estoy muy contenta», afirmó Meghan, de 37 años, que apareció con un vestido camisero blanco ante las cámaras de televisión en el St Georges Hall del Castillo de Windsor. El príncipe Harry, de 34 años, afirmó no poder decir aún a quién se parece el bebé.
El niño nació a primera hora del último lunes y se convirtió en el séptimo en la línea de sucesión a la Corona de su bisabuela Isabel II. Los padres decidieron tomarse unos días para mostrar su pequeño al mundo, y finalmente llegó la hora.