El presidente electo de Chile, Sebastián Piñera, declaró hoy que si viajara a Cuba no se reuniría con Raúl Castro, como hará hoy la mandataria Michelle Bachelet, sino que lo haría “con la disidencia y con los cubanos que están luchando por recuperar su propia libertad, democracia y Estado de derecho”.
Piñera añadió que cree que “en Cuba tampoco hay democracia, libertades, ni respeto a los Derechos Humanos”, y recordó que cuando él visitó el país como presidente ya se reunió con la disidencia.
Estas declaraciones fueron hechas a la prensa tras una reunión que mantuvo el presidente electo con la ex fiscal general venezolana Luisa Ortega Díaz, opositora al mandato de Nicolás Maduro.
En cuanto a la situación actual de Venezuela, Piñera se comprometió a hacer “lo que esté a nuestro alcance dentro del marco del Estado de derecho para colaborar a recuperar la democracia, las libertades y el respeto los Derechos Humanos”.
El futuro presidente puso en duda los recientes resultados electorales obtenidos por el chavismo al declarar que “es fundamental que Venezuela abra las puertas a elecciones libres, transparentes y que den garantías a todos, que se liberen a los presos políticos, se restablezca el Estado de derecho y también que se logre la unidad de todas las fuerzas democráticas en Venezuela”.
Piñera concluyó diciendo que será prioritario para su gobierno “ser colaboradores eficientes para mitigar la crisis humanitaria que está viviendo el pueblo de Venezuela”.