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El presidente de Peñarol de Uruguay se refirió a los incidentes en Rosario: «Fue todo una locura»


"Son más cosas de las Copas de los 80 o 90, o los 70, que Peñarol las supo jugar de esa manera", indicó Ignacio Ruglio

El presidente de Peñarol de Uruguay, Ignacio Ruglio, se refirió a los lamentables incidentes que tuvieron lugar en el partido ante Rosario Central, en el estadio Gigante de Arroyito, por la primera fecha del Grupo G de la Copa CONMEBOL Libertadores.

Tras lo que fueron las agresiones que sufrió la gente del “Carbonero” en la previa del partido y el corte en la cara del futbolista Maximiliano Olivera por un piedrazo desde la parcialidad del “Canalla”, el mandatario del equipo charrúa comenzó expresándose sobre las vallas que algunos hinchas de Rosario Central le lanzaron a la tribuna visitante: «Ver lo que habían tenido que vivir, que las vallas cayeron desde arriba, y después cuando los jugadores van a saludar a la hinchada recibir una piedra de ese tamaño… Fue una locura. Veremos ahora. Hay que tener dos días en el fútbol para saber que esas vallas iban a volar a la gente».

«Son más cosas de las Copas de los 80 o 90, o los 70, que Peñarol las supo jugar de esa manera. En tiempos de ahora no debería correr. La sanción a Rosario Central es cuestión de Conmebol y autoridades. Ellos sabrán lo que tienen que hacer. Nosotros queremos ver es qué pusieron en el informe y lo que nos tocó vivir, lo que le tocó vivir a Maxi. En los tiempos que corren es una locura. Le pasó a un centímetro del ojo. Son cosas que no deberían pasar. Se la tiró a ocho metros y de frente, sin un alambrado ni nada. No deberían pasar en estas épocas. No soy yo quien tiene que poner las penas ni multas» añadió Ruglio.

Además, el presidente del “Carbonero” explicó que ya hace varios días había empezado la locura: «Ya había empezado hace varios días. Lo habíamos dicho y dejado por escrito, era una locura el espacio que le dieron a Peñarol para 2800 entradas. Era imposible que ahí entraran 2800 personas. Después también dejamos por escrito y, en las reuniones de seguridad hablamos claro, era imposible que nos pusieran abajo con gente arriba y que pusieran vallado arriba».

«Nos sacaron a dar una vuelta por todo Rosario. Estando a 12 cuadras del estadio nos hicieron llegar 20 minutos tarde» declaró Ruglio refiriéndose al trato que tuvo la policía santafesina para con la parcialidad de uno de los dos clubes más populares de Uruguay.

Por último, el mandatario del club uruguayo se refirió por las bombas de estruendo que lanzaron desde la tribuna de Peñarol hacia la platea del equipo rosarino: «Hay organismos pertinentes de tomar la sanción. Si hay algo de eso, que algo me llegó, tendrán que relatarlo y habrá que hacerse cargo. Lo que quieren intentar justificar es que por una bomba de estruendo tiraron cuatro vallas desde arriba. Ahora vamos a ver los informes de los veedores de Conmebol si reflejan lo que nos pasó. En base a los informes, vamos a hacer nuestro descargo y la descripción de lo que nos tocó vivir».