Política y Economía

El Presidente adelantó «conversaciones» en el G20 por la guerra para «encontrar soluciones»


Fernández dijo en una conferencia de prensa ofrecida en la Embajada argentina en la capital francesa, que "nada hay más revolucionario en el presente que recuperar la paz"

El presidente Alberto Fernández aseguró este sábado que en la Cumbre del G20 en Indonesia, que se llevará a cabo la semana próxima, van a seguir «las conversaciones» sobre la guerra entre Ucrania y Rusia con el propósito de «encontrar soluciones» al conflicto que se desarrolla en el este de Europa, al concluir hoy su gira por Francia, donde participó del Foro de París por la Paz.

Fernández dijo en una conferencia de prensa ofrecida en la Embajada argentina en la capital francesa, que «nada hay más revolucionario en el presente que recuperar la paz» y remarcó que «la verdadera revolución es alcanzar la paz en el mundo».

Para Fernández, el pedido de paz «no debe ser una propuesta de un país individual» sino una iniciativa más amplia, y por eso insisto en que la discusión salga del Hemisferio Norte y se traslade a todo el mundo».

«Cuando participamos en el G7, además de Argentina, hubo representantes de la Unión Africana, India, Indonesia. La idea era decir que la guerra no era un problema de la OTAN con Rusia ni de Europa con Rusia, ni de Rusia con los Estados Unidos. Era un problema del mundo y el Hemisferio Sur estaba pasándola muy mal, en un escenario en el que la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) está preanunciando una hambruna que va a alcanzar a 300 millones de habitantes, que en su mayoría están en el Hemisferio Sur», subrayó.

El mandatario insistió en la necesidad de que las partes involucradas en el conflicto no utilicen armas nucleares y no bombardeen centrales atómicas.

«Gracias a Dios con (el presidente de Francia Emmanuel) Macron nos entendemos muy bien. Confío que algún paso en ese sentido podamos dar en el G20. Pero ya no depende de nosotros dos. Está también de la voluntad de otros», completó.

Fernández explicó que «cuando hablamos de tratar de recomponer una mesa de diálogo es parte de eso» y refirió que «el diálogo que hay que recomponer no es entre nosotros, es entre Ucrania y Rusia; y nosotros debemos ayudar a ese diálogo».

En cuanto a las reuniones que mantuvo con el presidente galo indicó que «pudimos hablar de las cuestiones que nos preocupan como países, de las cosas que tenemos en marcha, los proyectos que tenemos como países», y consignó que Francia «es un inversor importante en la Argentina y por lo tanto todas esas cuestiones las pudimos repasar».

«Tenemos una mirada común sobre problemas que afectan a las mejores condiciones del desarrollo humano, temas vinculados al clima, al género, a la discriminación, a la paz, a los derechos humanos también», repasó.

También tocaron los problemas vinculados a la guerra entre Ucrania y Rusia porque «es un tema que venimos planteándonos desde hace ya varios meses, desde el momento en que reclamé que por favor Europa entendiera que hay un hemisferio que es el Hemisferio Sur donde no vuelan las balas pero donde se padece el hambre» y «donde los efectos de la guerra son efectos muy dañinos».

«Analizamos con el presidente Macron la situación actual del conflicto y la preocupación que tenemos y que tengo particularmente por la cuestión nuclear, por el uso de armas nucleares o por la posibilidad que de que se bombardeen centrales energéticas nucleares», añadió.

Y explicó: «Le planteé la necesidad de que abordemos ese tema con atención, que trabajemos para garantizar que eso no ocurra», para ir mañana a la Cumbre del G20 en Indonesia y «aprovechar la oportunidad de la presencia de otros líderes para seguir las conversaciones que hemos tenido nosotros dos».

En el G20 Fernández se reencontrará también con la titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, y en el último diálogo telefónico que mantuvieron el mandatario argentino le planteó «cómo los efectos de la guerra estaban dañando a todo el mundo, no solamente a Europa, a Rusia y a Ucrania, sino que a la Argentina concretamente la guerra le costó 5.000 millones de dólares que debimos pagar de más como consecuencia del costo de la energía, de los fertilizantes y de los alimentos».

Y le expuso «la necesidad de que de una vez por todas se revisen los sobrecargos que a nuestro juicio son mecanismos muy injustos que afectan a los países más castigados por las deudas y que en un caso como Argentina además es consecuencia de un endeudamiento absolutamente irresponsable que se tomó».

«Ayer, hablando con Macron, le volví a plantear el tema de los sobrecargos. Le pedí que por favor Francia nos acompañe con el planteo, y también le llamé la atención con un tema que por ahí no todos advierten, que sobrecargos también está pagando Ucrania», graficó.

Para el Presidente, «este es un muy buen momento para que, como Kristalina Georgieva ha dicho públicamente más de una vez, los programas sean revisados a partir de lo que ha ocurrido a partir de la guerra. Y seguramente será parte de la conversación porque será la continuación de esa conversación telefónica que tuve con ella, donde todos estos temas los hablamos».

Fernández y Macron también hablaron de Venezuela, y el mandatario argentino refirió que su par francés le propuso que, aprovechando la reunión del Foro por la Paz, «tratemos de volver a poner en marcha los mecanismos del Grupo del Contacto de los que Argentina es parte, y lo hicimos».

En ese sentido contó que «ayer tuvimos una muy buena reunión con la canciller de Noruega (Anniken Huitfeldt), que ha hecho un trabajo que quiero destacar muy especialmente».

Y amplió: «Pudimos estar el presidente de Colombia, Gustavo Petro, y escuchar las posiciones de la oposición venezolana y del representante del gobierno de Venezuela que viajó a París. Y creo que es un buen inicio para reiniciar las conversaciones y ver de qué manera podemos ir superando los escollos que ha debido enfrentar Venezuela para que rijan ya plenamente los derechos humanos y rija plenamente la democracia».

«El objetivo es básicamente que los venezolanos encuentren una solución, contrariamente a lo que nos pasó en los años de (el ex presidente estadounidense Donald) Trump, es no intervenir como países en Venezuela sino acercar a los venezolanos a que ellos encuentren una salida y en todo caso ser nosotros una suerte de garantes de los compromisos que se van asumiendo», prosiguió.

«Si los venezolanos se ponen de acuerdo se van a dar cuenta las dos partes, una de las partes lo tiene más claro que la otra me parece, que las sanciones económicas no afectan centralmente al gobierno de Venezuela sino al pueblo de Venezuela», remarcó.

Y criticó que las sanciones económicas «no son solo de los Estados Unidos, ayer mismo la Unión Europea prorrogó las sanciones a Venezuela», con lo cual «necesitamos que todos revisen este tema y que las partes que están negociando, que son venezolanos, sean los que pidan fundamentalmente que le devuelvan a Venezuela los recursos que le han quitado».

«Lo que espero es que tenga Estados Unidos la misma vocación que nosotros de que Venezuela recupere la convivencia democrática y la plena institucionalidad. Trabajamos para que en Venezuela ya no haya más denuncias por violaciones a los derechos humanos, ni más denuncias por proscripciones políticas», concluyó.