En julio, una familia necesitó casi $250 mil por mes para no ser pobre, según el último informe del Indec
No es un secreto para nadie que Argentina no está pasando por su mejor momento económico, sino todo lo contrario. Dicha situación afecta directamente a la población, que cada vez le alcanza menos el dinero para cubrir sus necesidades ante una alta inflación que no se detiene. De hecho, la canasta básica de alimentos (CBA) subió 7,1% en julio, lo que generó que una familia tipo necesitara 248 mil 962 pesos para no ser pobre.
Este dato es el resultado del último informe realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el cual mostró que la Canasta Básica Total (CBT), que se calcula a partir de la CBA e incluye bienes y servicios no alimentarios – vestimenta, transporte, educación, salud-, aumentó 7,1% en julio y quedó por encima de la inflación (6,3%). En detalle, tuvo un incremento de 52,4% en el primer semestre de este año (a junio), contra 50% del IPC en este mismo período, mientras que en los últimos 12 meses (a julio) el alza fue de un 123% contra 115,6%.
Por su parte, la Canasta Básica Alimentaria, que se centra en el costo de los productos que necesita una familia durante un mes para cubrir el 100% de sus necesidades alimenticias, llegó a un valor de 111.642 pesos. De esta forma, un adulto necesitó al menos 36.130 pesos para no ser indigente, tomando en cuenta el índice alimentario, y 80.570 pesos para no ser pobre.
Costos de la canasta básica para hogar de familia tipo
Cabe destacar que, al momento de analizar el aumento tanto de la CBT, como de la CBA, hay que tener en cuenta que esta medición es realizada en base al consumo de una familia promedio tipo 2, la cual, según el Indec, estaría compuesta por un varón de 35 años, una mujer de 31 años, un hijo de 6 años y una hija de 8 años.
Evolución de la canasta básica con respecto a la inflación 2023
A pesar de que la CBA se ubicó por debajo de la inflación en junio, pues el alza fue de 5,2% y la del IPC fue de 6%; durante julio la historia volvió a cambiar: de acuerdo a la última medición del INDEC, la canasta básica alimentaria y la canasta básica total registraron un incremento del 7,1%, quedando por encima de la inflación que en ese mes fue de 6,3%.
Evolución de la canasta básica con respecto a la inflación diciembre 2017 – julio 2023
Sin embargo, el gasto en la vida real varía de acuerdo a diversos casos. Por ejemplo, una familia de tres integrantes – una mujer de 35 años, un hijo de 18 y su madre de 61- necesitaría unos 200 mil pesos para llegar a su Canasta Básica Total y casi 90 mil pesos para adquirir una Canasta Básica Alimentaria, explica el INDEC.
Inflación por rubros
Como se mencionó anteriormente, el Nivel general del Índice de precios al consumidor (IPC) registró un alza mensual de 6,3% en julio de 2023, y acumuló una variación de 60,2%. En la comparación interanual, el incremento alcanzó el 113,4%. A pesar de que el rubro Alimentos y Bebidas Alcohólicas (5,8%) sufrió una variación menor a la de la inflación, es la división de mayor incidencia en todas las regiones del país.
La división de mayor aumento en el mes fue Comunicaciones (12,2%), producto de la suba de servicios de telefonía e internet. Le siguieron Recreación y Cultura (11,2%) –principalmente por los aumentos en los paquetes turísticos– y Bebidas alcohólicas y tabaco (9,0%).
El salario mínimo no alcanza para costear la canasta básica
Lo cierto es que, en la actualidad, para cualquier familia es difícil costear la Canasta Básica Total, tomando en cuenta que el Salario Mínimo, Vital y Móvil se encontraba en $105.500 en julio, mientras la CBT ascendió a $250.000 aprox. para el mismo mes y aunque llegaría a $118.000 en septiembre, durante todo el 2023 el costo de la canasta superó en 2,5 veces al del Salario.. En pocas palabras, muchas de las personas del país, gastan casi todo su salario solo para cubrir las necesidades básicas y a otras ni siquiera les alcanza y tienen que recurrir a entidades financieras, ya sea a través de préstamos bancarios o a tarjetas de créditos para poder comprar el alimento diario.
Por ejemplo, una familia tipo donde ambos adultos ganan sueldo mínimo, el ingreso mensual que tuvieron durante julio fue de $111.000, mientras que el valor de la CBT fue de $248.962 para el mismo período, es decir, que no sería suficiente y solo alcanzaría para cubrir la totalidad de la canasta básica alimentaria, que ascendió a $111.642 para el mismo mes.
En esa línea, el Centro de Investigación y Formación de la República Argentina señala que el poder adquisitivo del salario mínimo, vital y móvil ha mantenido una tendencia negativa desde 2012. “Entre 2021 y 2022, en un contexto de inflación creciente, existieron siete instancias de actualización del salario mínimo, que no lograron una recuperación de su poder de compra. El año 2022 cerró con una caída promedio del salario mínimo real del 1,3%, que lo ubicó 33% por debajo del nivel de 2015”, manifiestan. A esto se le suma una nueva caída de 6% del poder de compra en los primeros seis meses de 2023.
Adicionalmente, el Indec informó que el índice de salarios subió un 6,1% en junio (último mes informado). “El indicador acumula una suba del 47,2% respecto de diciembre previo. El crecimiento mensual se debe a subas de 5,7% en el sector privado registrado, 6,0% en el sector público y 7,5% en el sector privado no registrado”, detalló el organismo.
En tanto, el ajuste de 108,7% en los últimos 12 meses dejó a los salarios por debajo de la Canasta Básica Total, que tuvo un aumento del 123% entre junio de 2022 e igual mes de este año, en otras palabras, el costo de vida esencial aumentó 14.4 puntos porcentuales por encima de los sueldos. Incluso, esto se repitió en todas las ramas salariales, hasta la del sector público, que tuvo un ajuste anual del 121,4% y se ubicó 1,6 puntos por debajo de la CBT. La más perjudicada fue la del sector privado no registrado que para el mismo período interanual tuvo un ajuste en su índice salarial de sólo el 82,5%.
Lamentablemente, estas cifras reflejan sólo una parte de la crisis económica que atraviesa el país, que ha causado que argentinos y argentinas deban endeudarse o vivir en deplorables condiciones para poder subsistir ante los pocos ingresos económicos que perciben y la constante escalada de la inflación.