Real Madrid comienza el miércoles ante el París Saint-Germain su andadura en la Liga de Campeones dispuesto a borrar el fiasco de la pasada temporada y levantar otra Orejona de la mano del técnico francés Zinedine Zidane.
El equipo blanco viaja a la capital francesa con el doloroso recuerdo de la eliminación en octavos de final de su competición fetiche frente al Ajax de Ámsterdam, que le humilló en el Santiago Bernabéu 4-1 tras una victoria blanca en la ida 2-1.
Este borrón se enmarcó en una temporada merengue para olvidar, que el Real Madrid intenta ahora superar con el regreso de Zinedine Zidane al banquillo y la llegada de nuevos reclutas, con el belga Eden Hazard como gran estrella.
«Sí, desde que llegas la sientes (la conexión Real Madrid- Champions)», aseguró Hazard en una entrevista con los medios de la UEFA.
El delantero belga jugó sus primeros minutos el pasado sábado en partido oficial con su nuevo equipo contra el Levante, tras superar una lesión muscular, y todo apunta a que será uno de los titulares en el Parque de los Príncipes.
El local, sin Neymar ni Mbappé
Neymar, protagonista del culebrón del verano, que se redimió ante la afición parisina con un gol salvador en el descuento el sábado en la victoria 1-0 contra Estrasburgo, está sancionado (su suspensión fue reducida este martes de 3 a 2 partidos), mientras que la joven estrella francesa Kylian Mbappé sigue lesionado.
«Estoy muy triste de no poder jugar, pero aportaré todo mi apoyo desde la tribuna al equipo y espero volver al 100% para seguir dando el máximo», escribió el atacante en su cuenta de Twitter.
La tercera pata del ataque francés, el uruguayo Edinson Cavani, también sigue lesionado y no estará frente al Real Madrid, pese a que parecía que el charrúa estaría listo para el duelo europeo.
Tras su dura eliminación en octavos el pasado año ante el Manchester United (2-0, 1-3), el PSG sigue en su búsqueda de un éxito importante en la máxima competición continental, aunque su director deportivo, Leonardo, rebaja las expectativas y apunta a una temporada de reconstrucción.
«No será la temporada del brillo, vamos a ganar la Liga de Campeones, no será así», dijo el 31 de agosto, afirmando que «las ambiciones no se han revisado a la baja, estamos obligados a ser ambiciosos en el PSG. Sólo digo que tenemos que arreglar cosas».
Un arreglo que podría empezar el miércoles contra un Real Madrid, que en 2018 apeó al equipo francés de la Champions.